15/04/18 21:55
El ataque combinado de Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña sobre instalaciones vinculadas con el programa de armas químicas del régimen sirio de Bachar al Asad conmovió ayer, de nuevo, al mundo. Al bombardeo, siguiendo los eufemismos bélicos de estos casos, se le atribuyen efectos quirúrgicos suficientes para evitar nuevas oleadas, una contención que también ha logrado limitar la respuesta de Rusia. De hecho, el presidente Putin no plantea represalias militares derivadas de una ofensiva que ha obtenido el aval de la mayoría de los gobiernos occidentales, incluido el de España.