Las indicadores del Boletín de Coyuntura Económica, elaborado por el Observatori Socioambiental de Menorca (Obsam), presentados ayer por el Cercle d'Economia de Menorca concluyen que la reactivación económica y su traslado al consumo está teniendo como consecuencia un aumento de precios. Un hecho que implica dos peligros importantes. A nivel interno este incremento provoca un retraimiento del consumo.
Al mismo tiempo, y a nivel externo, que Menorca se convierta en un destino caro -una percepción que se ya se está extendiendo por los altos precios que se piden para las semanas de la temporada alta- lo que resta competitividad y atractivo a la Isla frente a otros destinos competidores. Asociar a Menorca a un destino con precios elevados significa un grave error en el momento que se están recuperando otros países -norte de África y Turquía- gracias a unas ofertas muy agresivas y con precios inferiores a los que se están pidiendo en Menorca.
El análisis del Cercle d'Economia concluye con una severa advertencia: es preciso moderar los precios, porque, en caso contrario, vamos a morir de éxito y superados por quienes optan por la contención.
