Una modificación unilateral de las condiciones acordadas para la gestión de los 165 amarres del Moll de Llevant ha motivado la revocación de la concesión a Trapsa Yates. Tras contar con el informe favorable del Consejo de Estado, el presidente de Autoridad Portuaria de Balears, Joan Gual de Torrella, ha firmado la caducidad de la concesión y ha dado un plazo de un mes a la antigua empresa de Gerardo Díaz Ferrán para formalizar la entrega.
Trapsa Yates se adjudicó en 2008 la explotación de estos amarres en el puerto de Maó por un periodo de catorce años y diez meses. Las irregularidades detectadas en esta adjudicación forman parte del 'caso Mar Blau'que son investigadas en sede judicial con importantes penas de prisión solicitadas por el fiscal para Díaz Ferrán, Francesc Triay y Angel Matías.
Una vez se haya formalizado la devolución de estos 165 amarres corresponderá a Autoridad Portuaria decidir su futuro y si convoca un concurso para adjudicar la gestión de este tramo del puerto mahonés. Una oportunidad del Club Marítimo de Mahón para recuperar estos amarres, lo que dará recursos a la veterana entidad náutica para su actividad deportiva y social.