El congreso que durante este fin de semana ha celebrado el PSIB-PSOE ha evidenciado el control absoluto que ejerce su secretaria general, Francina Armengol, sobre todo el aparato del partido en Balears. No se ha escuchado ninguna voz crítica o discrepante sobre la estrategia de la formación que, según Armengol, tiene como principal reto y objetivo revalidar el poder de la izquierda en las elecciones autonómicas de 2019.
El PSIB-PSOE trata de coger aire tras los últimos desastres electorales para volver a ser el eje de los partidos de izquierda, aunque sea a costa de sus aliados más próximos. En este último tramo de la legislatura Armengol quiere recuperar el liderazgo de la izquierda en Balears aprovechando la debililidad de los dos socios del Pacte: Més y Podemos. El PSOE reclama el protagonismo de la izquierda frente al PP y otros partidos de centro-derecha, para lo que debe rentabilizar su gestión institucional. Una apuesta no exenta de riesgos por las suspicacias que genera en Podemos y Més, imprescindibles para continuar en el poder. En clave menorquina sobresale la elección de la diputada María José Camps como secretaria de Política Autonómica de los socialistas de Balears.
