El secretario general de Podemos en Balears, Alberto Jarabo, manifestó ayer que no optará a la reelección para evitar un enfrentamiento con Laura Camargo, 'número 2' del grupo parlamentario, que cuenta con el apoyo de los diputados autonómicos de la formación morada. Este relevo abrirá una dinámica distinta en el Pacte que, en junio de 2015, permitió formar el Govern presidido por la socialista Francina Armengol.
Camargo, integrada en Izquierda Anticapitalista, mantiene un perfil que dista mucho de ser un socio amable para el Ejecutivo balear, formado hoy por PSIB-PSOE y Més per Mallorca, tras el desmarque de Més per Menorca. Un colectivo minoritario de Podemos, Izquierda Capitalista, lograría patrimonializar la estrategia de todo el partido en Balears.
La irrupción de Camargo hace presagiar una línea política mucho más radical, lo que acarreará consecuencias para el Govern en su conjunto.
En Menorca, Podemos debe hoy definir su estrategia y reactivar su implantación. La expulsión de la diputada Montse Seijas, la acción de los cargos institucionales y la disminución de la actividad de los círculos en la Isla han de ser analizados.
