Las seis condiciones que ayer dio a conocer el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, para apoyar la segunda investidura de Mariano Rajoy forma parte del acuerdo entre ambas formaciones para desbloquear el colapso institucional que vive España desde diciembre. La suma de los dos partidos, con el apoyo de Coalición Canaria, garantiza 170 votos a favor del candidato del PP, a solo seis de la mayoría absoluta. El gesto de Ciudadanos cambia de forma radical el escenario político.
Las condiciones que ha planteado Rivera son perfectamente asumibles por el Partido Popular, aunque algunas son de compleja materialización. Ciudadanos debe concretar hasta dónde quiere corregir la proporcionalidad de la Ley Electoral o qué investigará una comisión parlamentaria del 'caso Bárcenas', cuando el asunto ya está judicializado. Guiños, en definitiva, en un pulso que gana Rajoy. Lo más llamativo es la ausencia de exigencias de Ciudadanos en materia económica o social para la alianza con el PP, lo que se deberá afrontar en los próximos días.
Con el nuevo panorama, las negociaciones con otras formaciones, como el PNV, continuarán hasta el último momento.