Editorial05/08/16 0:00
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Los ayuntamientos de Es Migjorn Gran y Alaior han manifestado su malestar por las decisiones que, de forma unilateral, ha aprobado el gobierno municipal de Maó al fijar los martes y los jueves para organizar mercados con vendedores ambulantes. La concejal de Promoción Económica de Es Migjorn Gran, Maria del Mar Ameller Sales, lamenta que la iniciativa pionera del Dimarts as Migjorn se vea perjudicada por una actuación similar el mismo día en Maó; y también se queja la alcaldesa de Alaior, Misericordia Sugrañes, por las coincidencias de los jueves con Maó.

El conseller de Proyección Económica del Consell, Miquel Company, se ha ofrecido para mediar entre los ayuntamientos y fijar criterios de coordinación. Aquello que se reclama desde la oposición y se propugna durante la campaña electoral se debe cumplir y aplicar después, cuando se asumen responsabilidades de gobierno. La regulación de los mercados de ambulantes es competencia municipal -que en el caso de Ciutadella debe evitar los problemas que ocasionan las furgonetas estacionadas en la plaza des Born- pero es positivo el ofrecimiento del Consell para aportar sensatez y acuerdo.