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La undécima edición del foro Sine Dolore, que durante la pasada semana volvió a transformar Menorca en un parque mundial contra el dolor, ha concluido con la novedosa propuesta de instituir el Día mundial contra el Dolor y celebrar cada año esta jornada el 7 de mayo. Gracias a la iniciativa, la tenacidad y la perseverancia del doctor Jordi Moya, este encuentro científico internacional y multidisciplinar se ha consolidado y hoy, tras once convocatorias, se ha convertido en una cita obligada para los profesionales, las entidades e instituciones que dedican sus esfuerzos a combatir el dolor crónico.

El congreso Sine Dolore reúne a expertos, profesores e investigadores que durante varias jornadas tienen la oportunidad de exponer y debatir los avances, las terapias y nuevas técnicas para combatir el dolor. Al mismo tiempo, aportan nuevos conocimientos y el resultado de las investigaciones para mejorar la calidad de vida de los enfermos crónicos y personas que sufren por distintas dolencias. Este foro debe tener continuidad, tanto por sus aportaciones en el ámbito médico y sanitario, porque posibilita la llegada a Menorca, coincidiendo con el arranque de la temporada turística, de congresistas y sus acompañantes, procedentes de todo el mundo, lo que favorece y dinamiza la economía de la Isla. El doctor Moya ha acertado y ha acreditado su espíritu emprendedor y visión de futuro.