En relación a los dos anteriores «pactes de progrés» para formar el Govern balear, el que hoy está en el aire viene marcado por el poder de decisión de Madrid a través de los nuevos líderes de la izquierda: el socialista Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, de Podemos. Antes el PSIB-PSOE negociaba con PSM y UM, sin disciplinas estatales.
Pero ahora, los socialistas de Francina Armengol están sujetos a un nuevo contexto donde sus superiores orgánicos negocian con los de Podemos un gran reparto de instituciones en toda España. Al mismo tiempo, MÉS está cada vez más cerca de Podemos, con grandes posibilidades de concurrir juntos a las elecciones generales. La coalición MÉS ya no es solo el PSM.
Jamás se había vivido tanta incertidumbre. Pedro Sánchez y Pablo Iglesias propugnan que el PSOE asuma los gobiernos autonómicos donde la izquierda pueda formar mayoría, y que Podemos haga lo mismo en los grandes ayuntamientos. Pero Valencia y Balears, con Compromís y MÉS, son dos casos diferenciados, lo que abre la puerta a un reparto de presidencias que se decidirá en Madrid. Un mal acuerdo en Balears se puede recomponer, uno en Madrid tendrá difícil solución.
