Mañana, con el encuentro que el papa Francisco mantendrá con todos los obispos de España, concluirá la visita ad Limina Apostolorum que han llevado a cabo los prelados de la Conferencia Episcopal Española. Entre ellos, el obispo de Menorca, Salvador Giménez, que se ha desplazado a la Santa Sede acompañado por el vicario general de la diócesis, Gerardo Villalonga.
Durante estas jornadas, el obispo Salvador ha tenido la oportunidad de mantener encuentros con los responsables de los dicasterios romanos y también participó en una audiencia con el Santo Padre en la que, con otros obispos españoles, tuvo la oportunidad de reflexionar sobre la situación de las pequeñas diócesis, como la menorquina.
Al regresar a la Isla y reincorporarse a la sede episcopal de Severo, Salvador Giménez debe transmitir a la diócesis de la que es su pastor el impulso y el liderazgo que ha tenido la oportunidad de recibir en esta intensa estancia en el Vaticano.
Transmitir y saber comunicar el mensaje del Evangelio en el siglo XXI, con el impacto de las nuevas tecnologías y un momento de gran cambio socioeconómico. es el gran reto de la diócesis de Menorca que ve reforzada su doble dimensión, local y universal, con esta visita.