El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, ha anunciado un cambio en la metodología para la confección de las balanzas fiscales en cada autonomía. Unos datos que no se dan a conocer desde el 2008, y, además, con datos referidos al año 2005.
Así, habrán transcurrido nueve años cuando el próximo mes se den a conocer las nuevas cifras de las estados financieros entre el Gobierno central y las comunidades autónomas.
Estas cifras serán relevantes y determinantes en la definición del nuevo modelo de financiación autonómica. El cambio de fórmula para el cálculo de la balanza fiscal pasará de ser territorializado -la diferencia entre ingresos y gastos de cada autonomía y el Estado- a contabilizar la globalidad de los servicios que percibe cada ciudadano. En el caso de Balears, el agravio financiero es de tal magnitud que sólo podrá ser maquillado. Resulta falaz pretender imputar a los ciudadanos de Balears una participación en los costes del aeropuerto de Barajas o el Museo del Prado. Solo el importe del billete de avión para desplazarse a Madrid y disfrutar en igualdad de condiciones de ambos servicios derriba cualquier hipótesis.
