Jejeje, los arquitectos también somos ciudadanos que podemos opinar de lo que nos parezca. También circulamos por la carretera con nuestros coches y también sufrimos el descontrol de estos últimos años de una carretera sin finalizar por cuestiones políticas.
Yo nunca he estado en contra de un proyecto de carretera que garantice seguridad, con puentes elevados o rotondas deprimidas. La opinión de los ingenieros no me interesa mucho, es verdad, porque su formación no coincide con mi manera de ver el territorio o el urbanismo, ellos priorizan los coches y que puedan circular a gran velocidad de forma segura, yo defiendo que las carreteras son necesarias para la conexión de los pueblos y ciudades en todos los sentidos. Efectivamente el carril bici paralelo a la carretera, como te quiso vender otro arquitecto, es una utopía, no estoy de acuerdo con un carril bici incorporado a la sección de la carretera, no encuentro un recorrido ni atractivo ni saludable.
Yo intento explicar que debemos aprovechar la carretera como infraestructura pública para mejorar aspectos medioambientales, cableado, red de agua, mayores cruces verdes, etc. Esto es la diferencia entre un arquitecto del montón y un gran ingeniero de caminos canales y puertos, la visión global de la sociedad, del territorio, de las infraestructura, de la arquitectura y el urbanismo, algo muy complicado para la mente de un ingeniero pero más fácil para la de un ingeniero frustrado. A partir de aquí, ancha es Castilla.
Un abrazo a todos.