España ha atravesado una crisis tremenda, lo sabemos todos. Me atrevo a decir, aproximando el foco, que los actuales menorquines no habíamos conocido nunca una crisis así, ni nada que se le pareciera mínimamente. Una pérdida de puestos de trabajo tan elevada y un nivel de pobreza como el que hemos visto nunca se nos hubiera pasado por la cabeza en esta isla. En España, a nivel global, teníamos que haber hecho las cosas de otra manera, pero aquel insensato gobierno que en los años 2007 y 2008 se empeñaba en hablar de mera «desaceleración económica» no solo no hizo nada sino que se empeñó en dilapidar nuestro envidiable nivel de endeudamiento con ocurrencias tales como bombillas de bajo consumo para todos, planes E desorbitados y absolutamente absurdos. España se nos iba por el desagüe, con un déficit desorbitado y un paro disparado, y el gobierno socialista no solo no hacía nada para remediarlo sino que persistía en su mundo de pin y pon, recordando agravios antiguos e ignorando los problemas reales.
Cartas del lector
Afianzar lo conseguido, apostar por el futuro
30/11/15 0:00
También en Opinión
- El caso de un restaurante de Maó: «No podemos servir cenas porque no hemos encontrado personal»
- El famoso actor que los vecinos de Es Canutells han visto en este velero de lujo
- La frase más repetida esta temporada turística en Menorca: «Más gente, pero menos gasto»
- Cinco heridos leves en un accidente en el polígono de Maó
- La calidad de los hoteles de Menorca se dispara y la oferta de tres estrellas se pierde