A principios de este año, concretamente en el mes de enero, un grupo de ciudadanos plantearon a la alcaldesa de Mahón, la intención de recuperar Sa Sínia de la Plana, que estaba en estado de abandono total. El proyecto le encantó a la Alcaldesa y se pasó del dicho al hecho.
El Ajuntament elaboró un proyecto de recuperación del patrimonio etnográfico: projecte de restauració Sínia de la Plana. El efecto llamada funcionó, de ser unos pocos voluntarios, se pasó a un grupo numeroso considerable, que los sábados los dedican a trabajar altruistamente, para restaurar Sa Sínia de la Plana.
Según el Die Balearen, Tomo I, La Isla de Menorca, paginas 322-323, en Menorca hay un total de 303 norias, de las que en el término de Mahón se contabilizan 129. Suelen estar situadas generalmente fuera de las poblaciones. A excepción de 12 en Mahón que se sitúan dentro de su casco urbano.
En la actualidad el parking conocido popularmente como des cuc, ocupa los terrenos de tres de estas sínies urbanas: la d´en Comellas, la d´es Cuc y la de la Plana.
Sa Sínia de la Plana, tiene un pozo de alrededor de 40 metros de profundidad picado a mano, conservando las huellas de las herramientas que se utilizaron para su excavación. El nivel del agua de encuentra a treinta metros de profundidad.
La recuperación de esta sínia pasa por dejarla en su estado inicial y para ello es necesario desmontar toda la instalación moderna consistente en una bomba y tuberías de hierro instaladas en el fondo del pozo y que substituyeron el tradicional sistema de ruedas y cadufos, movido por el tiro de una bistia.
La labor actual consiste en cortar y extraer todos los elementos de hierro de la instalación moderna y dejar el pozo en su estado original, para volver a instalar el mecanismo tradicional de extracción de agua.
Para poder sacar la bomba del interior del pozo y el último tramo de tubería de hierro de unos 7 metros de largo se contó con la ayuda de un camión grúa, que situado en la zona del parking movió la pluma hasta la vertical del pozo en cuyo fondo se encontraban dos voluntarios que fijaron adecuadamente las piezas a la grúa y fueron izadas sin dificultad.
Se han sacado unas viguetas de hierro encajadas en la pared y que llegan hasta el fondo de la sínia, así como el trabajo de recuperación de diversos elementos arquitectónicos de marés, la limpieza y desbroce del entorno, es una importante y constante labor de los entusiastas voluntarios, como la reconstrucción del mecanismo original de extracción de agua consistente en la rueda vertical que engrana en el rodet horizontal y que mueve el rest con los cadufos que van subiendo el agua hasta la superficie.
La rueda se reconstruía o se hacían gestiones para localizar alguna sínia, cuyos propietarios estuvieran dispuestos a donarla para su instalación en sa Sínia de la Plana. Vatuadell cent llamps, comentándolo con mi amigo Mariano Fuentes, me informó que unos vecinos suyos, el matrimonio formado por Margarita Diego Subías y Luis Solé Morall, en su finca tenían una. Conversaciones pertinentes con Margarita y Luis, les encantó la idea del proyecto de la restauración de la sínia, donación al canto y esta misma semana ha sido traslada a su nueva ubicación.
Todo el equipo, voluntarios, alcaldesa y regidor de Dalt la Sala, agradecen públicamente esta importante donación.
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