«A principios de año verificamos que una de las campanas, la más grande y antigua, estaba rota y no sonaba bien. El coste de reparación era muy elevado por lo que finalmente optamos por cambiar todo el campanario. En total son tres campanas nuevas», afirma el rector de la parroquia, Jesús Llompart.
La adquisición de las tres campanas ha tenido un coste de aproximado de 50.000 euros que han financiado a partes iguales la parroquia, el Ayuntamiento de Sant Lluís y una suscripción popular.
Llompart ha destacado el aporte de un nutrido grupo de franceses con segunda residencia en el pueblo. «Como Sant Lluís es un pueblo de tradición francesa, cuando les planteamos la posibilidad de que apoyaran económicamente la compra de las campanas, se mostraron muy entusiasmados y aportaron alrededor de 15.000 euros», ha explicado el párroco.
La encargada de la fabricación de las campanas ha sido la empresa valenciana 2001 Técnica y Artesanía, dedicada a la instalación de campanas y relojes. La campana más grande pesa unos 250 kg, la mediana unos 150 kg y la más pequeña unos 90 kg. Están hechas de una aleación de bronce, cobre y estaño. «Hemos tardado más o menos tres meses en terminar cada una», afirma Francisco Gómez, gerente de la empresa.
La instalación de las nuevas campanas se ha efectuado este martes. «Si Dios quiere, el próximo domingo haremos sonar la música de nuestro nuevo campanario», ha enfatizado Llompart.
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Em l'ho be que estavan es vessins sensa sentir renou