Las obras del carril bici cortan por error el gas en todo Maó durante tres horas

La fuga fue causada de forma fortuita por los operarios que trabajan actualmente en la construcción del carril bici a lo largo de la Vía de Ronda. Esta vez lo hacían a la altura de la rotonda que da acceso al cementerio cuando, al parecer, no advirtieron el conducto que canaliza el gas y lo sesgaron ocasionando un agujero del que inmediatamente comenzó a emerger hacia la atmósfera.

Fue imposible detener la pérdida debido al tamaño de la brecha pese al esfuerzo de operarios y bomberos por lo que, de acuerdo con el jefe de emergencias de la compañía, se decidió cortar las llaves del suministro y aislar la zona de influencia.

La Policía Local reguló el tráfico y dejó solo un carril de acceso por la vía en dirección a Es Castell, lo que originó largas retenciones, mientras los bomberos aguardaban que el gas acumulado en la cañería fuera saliendo a la atmósfera y se diluyera en el aire, como así sucedió.

Mientras tanto se dio aviso a los vecinos de la calle que conduce al cementerio para que evitaran el uso de los aparatos eléctricos debido a la peligrosidad que suponía la presencia del gas en la atmósfera, cuya salida se prolongó por espacio de una media hora hasta que la tubería se vació. Los bomberos utilizaron los detectores para comprobar la presencia del gas en el aire y descartar la adopción de otras medidas.

El corte del suministro acabó afectando a toda la ciudad en aquellos inmuebles que disponen de la canalización durante unas tres horas, hasta que el boquete en el conducto pudo ser reparado y sellado regresando a su posición original, lo que permitió restablecer el flujo.