La joya se descubre en un retrato antiguo de la familia, donde se observan las características de una pieza que tiene un valor histórico
26/11/19 20:13
La reina Isabel II visitó Menorca del 17 al 20 de septiembre de 1860. Se hospedó dos días en una casa señorial de los herederos de José Sancho, que popularmente se conocía como «casa Olivar» en la calle Sant Cristòfol, que desde esa fecha se llamó Isabel II. Como muestra de agradecimiento la Reina obsequió a la familia con un broche de oro y brillantes, que se engarzaba en una pulsera, en cuyo fondo se podían leer los detalles de esa donación.