TW
4

La Audiencia Provincial de Balears ha condenado a un hombre a pagar 4.110 euros por una prótesis de cadera, que creía que estaba cubierta por su seguro.

En concreto, la Audiencia ha estimado el recurso de apelación presentado por el proveedor de la prótesis contra otra sentencia dictada por un Juzgado de Ciutadella eximiendo al paciente de este pago.

El hombre fue intervenido en una clínica de Barcelona para implantarle una prótesis de cadera. La sentencia de la Audiencia Provincial recoge que el pedido de la prótesis fue realizado no por la clínica ni por el seguro, sino directamente por el cirujano.

La clínica emitió factura al seguro médico por los gastos de hospitalización e intervención, pero no por el importe de la prótesis.

La aseguradora no se hizo cargo de la prótesis alegando que no estaba cubierta por las condiciones generales de la póliza, mientras que la clínica sostiene que el paciente fue informado de la intervención, de la colocación de la prótesis y de la no cobertura por parte del seguro.

Los magistrados de la Audiencia consideran que el hombre está obligado a pagar por la prótesis finalmente implantada porque fue el beneficiario de este encargo, aunque pudiera creer que el importe estaba cubierto por su compañía y pese a que el pedido lo realizara el médico, pues lo hizo actuando en interés del paciente.