La operación se incautaron de numerosos medicamentos en Mallorca

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Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) se incautaron el pasado fin de semana de varios medicamentos y productos de procedencia no verificada por profesionales sanitarios en el registro de una finca ubicada a la entrada de Maó.

Este registro a la explotación ganadera mahonesa situada en el Camí de Ses Rodees, se enmarca dentro de la denominada 'Operación Cabriol' que tuvo su punto culminante la pasada semana con la detención de ocho personas en Mallorca y la incautación de numerosos medicamentos y útiles para administrarlos a caballos de carreras. El delito está tipificado como intrusismo profesional y maltrato animal.

Fuentes de la Benemérita informaron ayer al mediodía a «Es Diari» que los medicamentos incautados en la finca de Maó no constituyen un dopaje propiamente dicho, sino que han sido administrados sin el correspondiente control veterinario y su importación requiere de permisos específicos, extremo que se halla en fase de comprobación.

Responsables de esta ganadería tampoco pudieron fijar su procedencia ante los agentes de la Guardia Civil, que sospecharían de uno de los detenidos en Mallorca, encargado de distribuir los productos a las cuadras que los pedían. Éste es el único de los detenidos que no fue puesto en libertad tras tomarles declaración al día siguiente de su detención.

La finca de Maó ha sido, por el momento, la única que ha registrado el Seprona en Menorca desde que se pusiera en marcha esta operación que, no obstante, continúa abierta por lo que no se descartan nuevas detenciones, ha informado la Benemérita.

Las investigaciones descubrieron que en el desarrollo de la preparación de los caballos de carreras algunos preparadores podrían estar incurriendo en los mencionados delitos. La Guardia Civil registró domicilios particulares y cuadras de caballos en Manacor, Llucmajor, Sant Jordi, Villafranca, Felanitx, Cala Millor, Buger, y en las cuadras del hipódromo de Son Pardo, en Palma de Mallorca.

Antoni Catchot, presidente de la Sociedad Hípica Amigos del Noble Bruto, que organiza las carreras de trotones en el hipódromo de Maó, defendió meses atrás la limpieza del hipódromo mahonés, aunque también lamentó que los controles antidopaje a los equinos no se hicieran de forma periódica por la falta de medios, solo un par de veces al año.