Gürtel.- El presidente riojano apoya a Camps y dice que por lo que le llega "no es tan grave el tema"

LOGROÑO, 19 (EUROPA PRESS)

El presidente del Gobierno de La Rioja, Pedro Sanz, tiene "el mejor concepto" de su homólogo valenciano, Francisco Camps, en cuanto "a honradez y honestidad" y cree que hay que esperar a que se pronuncien los tribunales.

Sobre la imputación de Camps en el caso 'Gürtel' indicó que "por lo que a mi llega no es tan grave el tema, por lo que habrá que esperar que la Justicia determine el asunto". Dijo que pone la mano en el fuego por todo el mundo hasta que la Justicia determine.

Sanz añadió que "cuando los tribunales se pronuncien, a partir de ahí, si hay que pedir responsabilidades, yo levantaré la mano el primero". Precisó que "la presunción de inocencia debe estar por encima de todo", para indicar que a veces "juzgamos antes la sociedad que los jueces.

El presidente de La Rioja también señaló que "se está poniendo en peligro una de las patas en las que se sostiene el sistema democrático, como es el poder judicial". Aseguró que "los políticos estamos contaminando el tema de la Justicia", algo que "es lo peor", y que se pueda pensar que "se compran y se venden la sentencias". alimentándolo unos y otros. Mientras sea independiente será fuerte.

NEGOCIACIÓN CON ETA

Preguntado acerca de una posible negociación del Gobierno central con ETA, Sanz afirmó que "lo que creía hace un mes, ahora lo empiezo a dudar". Ante ello, reclamó la "máxima transparencia" al Gobierno de la Nación.

El presidente riojano indicó que hay determinadas manifestaciones sobre la negociación con ETA, que "a uno le generan dudas", por lo que insistió en que hay que ofrecer "transparencia" para que "entremos en la senda de la normalidad" en la lucha contra el terrorismo que pasa por aplicar el Estado de Derecho.

'BLINDAJE'

Sobre el recurso de inconstitucionalidad contra el 'blindaje' del Concierto Económico Vasco, Sanz afirmó que los riojanos "no estamos en contra del Concierto, sino que lo estamos del abuso que del mismo pueden hacer las Diputaciones Forales".

Sanz indicó que "no entendemos como en 32 años de Constitución podíamos recurrir esas normas y ahora nos dicen que no". Algo que achacó a que "ahora ganamos recursos y somos incómodos", queriéndonos hacer "una comunidad de segunda".

Por otro lado, consideró que "se ha fundido la lámpara del Gobierno" y que "hay que cambiarla por la del Partido Popular". Dijo que los ciudadanos "estamos cansados de promesas que no se cumplen", debido a que al Ejecutivo central "le falta decisión".

Sanz realizó estas manifestaciones en una entrevista en el programa 'Los Desayunos' de TVE, recogidas por Europa Press. El presidente riojano aseguró que el jefe del Ejecutivo Central, José Luis Rodríguez Zapatero, da muestras "de haber fracasado", así como haber hecho fracasar el proyecto socialista.

El jefe del Ejecutivo regional reclamó del Central "menos palabras y más hechos", así como un Gobierno que genera "confianza e ilusión". También declaró que da la sensación de que la Unión Europea "está dirigiendo España". Acusó a Rodríguez Zapatero y a la vicepresidenta primera, Elena Salgado, de ir a Europa "para examinarse".

Sanz afirmó que el Gobierno socialista "lleva dos años sin hacer nada, esperando que todo se resolviese solo", algo que ha generado que hayan "muerto empresas y dejar a familias en paro". Todo ello, añadió ha conllevado que la Unión Europea le haya exigido medidas para reducir el gasto público y el déficit.

"DECRETAZO E IMPOSICIÓN"

Calificó de "drásticas" las iniciativas llevadas a cabo por Rodríguez Zapatero, ya que eso de decir "me falta dinero, subo los impuestos, bajar el sueldo a los funcionarios y congelar las pensiones, lo hace alguien con poca visión y mediocre". Reseñó que hace falta una reforma laboral y del sistema financiero.

Sanz también indicó que ha visto en el presidente del Gobierno de la Nación algo que "genera desconfianza", ya que "tenía talante y todo lo consultaba, y en 48 horas ha pasado al decretazo y la imposición".

También indicó que, en la historia de la Democracia, es el "mayor recorte de derechos sociales, además realizado por un presidente socialista", ante lo que se preguntó que "¿cómo es posible que defienda el proyecto socialista".

Con el PP en el Gobierno central, Sanz afirmó que se reducirían cosas diferentes, tales como subvenciones a determinados colectivos, pero sobretodo "se priorizaría el gasto".