El vídeo que ha compartido Arran sobre el acto vandálico. | Arran

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El Sindicato Unificado de Policía ha reaccionado con contundencia al acto vandálico que protagonizaron esta semana jóvenes del grupo independentista Arran en la fachada de la Comisaría de Maó sobre la que lanzaron huevos y pintura en protesta por la infiltración de uno de sus agentes en colectivos independentistas.

A las amenazas de estos jóvenes en sus pintadas, el SUP reacciona con otras a partir de la querella criminal que ya prepara su equipo de abogados, explicó a este diario su delegado en Balears, Manuel Pavón.

En un comunicado, el sindicato policial advierten a estos jóvenes que «les temblarán las piernas en sus Países Catalanes imaginarios o en España, el país donde todos nosotros, incluidos ellos, tenemos la gran fortuna de vivir», por la demanda judicial que interpondrá esta asociación.

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El SUP condena el acto vandálico, que incluye una pintada en un edificio situado junto a la carretera general, en Es Plans de Alaior. Interpreta que esta reacción puede obedecer a un «arrebato de celos entre los varones valientes» porque el policía menorquín, al parecer, mantuvo relaciones íntimas con varias mujeres de los grupos donde se infiltró.

Recuerda, en este sentido, que las relaciones de las integrantes de estos colectivos son responsabilidad de ellas, y no del ordenamiento jurídico, y que la Policía siempre ejerce al amparo de la legislación, «y les guste o no, así ha sido, es y será».

Respecto a la ejecución de los actos vandálicos, el SUP considera que exhiben la cobardía de sus autores al publicar un vídeo con su cara cubierta y «amenazando a nuestros agentes que no vivirán con tranquilidad ni impunidad. El sindicato policial pide al grupo independentista catalán que sea valiente, «no unos cobardes atemorizados tras unos pasamontañas». Pero al mismo tiempo, les advierte que si lo hacen «quienes no vivirán tranquilos ni impunes serán ellos» por la querella criminal que presentarán en su contra.