Cubos para la recogida puerta a puerta que Es Castell tiene implantada. | ARCHIVO

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El Ayuntamiento de Es Castell ha iniciado la notificación a los vecinos del recibo de la recogida y tratamiento de basuras de este 2024 y ayer, en un pleno extraordinario, se aprobó la modificación de la ordenanza vigente para modular dicha tasa, que ahora se cobra en función de la superficie de la vivienda y no del número de personas que la habitan. La nueva normativa salió adelante con los votos del PP e IPEC y la abstención del PSOEy Som Es Castell.

El sistema para determinar el recibo fue muy criticado por la portavoz del PSOE, Joana Escandell, «la basura la genera la gente, no los metros cuadrados», afirmó, al tiempo que recordó que la implantación de una tasa diferenciada de basuras no es obligatoria por ley hasta 2025. «En 2024 no hacía falta cobrar la totalidad de ese gasto, pedíamos una bonificación para implantarla poco a poco, cobrar la mitad del recibo y en 2025, que es lo que ahora se debate, el cien por ciento», señaló la concejala socialista.

El equipo de gobierno no renuncia a «avanzar hacia una tasa lo más justa posible», explicó la teniente de alcaldía y responsable de Hacienda, Salomé Cabrera, para ello se ha trabajado en vincular el padrón de habitantes con los datos catastrales pero esa tarea aún no ha concluido, «ahora está más del 70 por ciento vinculado, es una buena noticia de cara a 2025», dijo, porque cuando se complete ese proceso se hará, si es necesario, otra modificación de la ordenanza para que el recibo se adapte a la casuística y sea más propocional.

Cuota fija domiciliaria

De momento se incorporan beneficios fiscales y, en el coeficiente de superficie, aumentan los tramos tarifarios, de tres a siete para las viviendas y de siete a once tramos en el caso de los comercios. Además la cuota fija domiciliaria pasa de los 110 euros de este año (79,10 euros por la recogida y 30,90 euros por el tratamiento) a 100 euros; esta cuota fija para los comercios se rebaja de 80 a 50 euros. El coeficiente de localización se mantiene igual.

La ordenanza, que ayer se aprobó de manera provisional y ahora sale a exposición pública por el plazo de un mes, incluye las bonificaciones por domiciliación del recibo (3%), por la autogestión de la fracción orgánica (hasta un 25 %) y por situaciones de vulnerabilidad (hasta el 70 %).

Sin penalizaciones

La modificación de la ordenanza no contempla por ahora penalizar a aquellos que no realizan la selección en origen de los residuos o no los depositan correctamente para su recogida. «No hay penalización para los incumplidores y debería existir», opinó el concejal de SomEs Castell, Simó Ferrando, quien consideró que no se cumple la filosofía del ‘puerta a puerta, que si bien no es el motivo de implantación de la tasa –esta es obligatoria por trasposición de una directiva europea a la legislación nacional–, sí coincide en el tiempo con la creación de la misma.

«El fondo del sistema era que el que más basura generase pasara más, y no se acaba de cumplir facturando por metros cuadrados», afirmó el edil de Som. En cuanto a penalizar a los incumplidores y a aquellos que boicotean la recogida de basura a domicilio, el alcalde, Lluís Camps, indicó que «existen otras ordenanzas para multar por los actos vandálicos o de sabotaje a la recogida selectiva de residuos».

El apunte

El cobro del recibo por las cocheras solivianta a parte del vecindario

Las plazas de garaje de parkings comunitarios están exentas de pagar la tasa, pero no sucede los mismo con las cocherías anexas a viviendas en el casco urbano. «No tendrían que pagar si no funcionan como vivienda o actividad económica», reprochó al equipo de gobierno el concejal de Som, Simó Ferrando. Tampoco el PSOE está de acuerdo con este punto, «se supone que una familia saca la basura una vez», señaló Joana Escandell, del PSOE, pero muchos vecinos están recibiendo dos recibos. Según la concejala de Hacienda, Salomé Cabrera, los propietarios pueden decidir que se emita un recibo «específico» solo para el garaje, o puede solicitar que esos metros cuadrados se vinculen a los de la vivienda y pagar por la totalidad de la superficie, eligiendo lo que le resulte más favorable. De momento es la solución que ofrece el Ayuntamiento, que «trabaja», añadió para mejorar el sistema y afinar la casuística.