Depósito de agua de Malbúger, junto a la planta desnitrificadora. | Josep Bagur Gomila

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La Conselleria de Salud ha ordenado a la empresa Hidrobal la suspensión de la actividad de la desnitrificadora de Malbúger, al considerar que la planta no cumple con el cometido de eliminar los nitratos del agua, que es la función para la que se construyó.

Así lo confirmó ayer la directora general de Salud Pública, Antònia Esteban, quien explicó que la orden de cierre de la planta se cursó el pasado 3 de octubre, si bien ya había sido desconectada de forma cautelar el pasado 26 de septiembre.

Además, desde la Conselleria han instado a Hidrobal a que les haga llegar todos los controles analíticos que se han realizado, y también les ha ordenado que informen a la población, a través de un bando, sobre la no aptitud del agua para el consumo humano. Sin embargo, a día de ayer, la empresa no había cumplido ninguno de estos dos requerimientos.

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Responsabilidad compartida

En cuanto a las responsabilidades de todo lo sucedido, Esteban remarca que «la empresa Hidrobal es la responsable de la gestión del agua, aunque el Consistorio tiene una responsabilidad compartida». «La empresa tiene la responsabilidad de hacer las analíticas, pero las decisiones sobre el suministro de agua o sobre no informar de que el agua no es potable es de los dos», remarcan desde la Conselleria, desde donde también lamentan que han tenido conocimiento del mal funcionamiento de la planta a través de la prensa. «Cuando se determina un nivel de nitratos por encima de 50 miligramos por litro, se tiene que poner en conocimiento inmediato de la autoridad competente, y no se ha hecho», señalan.

Ahora, la orden de la Conselleria implica que la empresa debe parar la planta desnitrificadora y suministrar el agua a través de otros pozos, y no se podrá volver a poner en marcha    hasta que «la empresa    sea capaz de demostrar que cumple con la función de eliminar los nitratos del agua de consumo».

Expediente sancionador

Ante la orden cursada por la Conselleria, ahora Hidrobal dispone de un plazo de diez días hábiles para presentar alegaciones, después de lo cual la Conselleria iniciará un expediente sancionador, que servirá para dirimir los incumplimientos de la empresa, así como sus responsabilidades.

«Desde la Dirección de Salud Pública actuamos para garantizar la protección de la salud de la población, y es importante dejar claro que nuestro papel es de vigilancia, pero el responsable de autocontrolarse y de garantizar que la calidad del agua que suministra el Ayuntamiento cumple todos los parámetros que marca el decreto es de la empresa gestora, en este caso Hidrobal», subraya Esteban.

El apunte

No se ha pedido permiso para activar la desnitrificadora de Sant Climent

Desde la Dirección General de Salud Pública señalan que desde el Ayuntamiento de Maó únicamente se les ha pedido permiso para construir la planta desnitrificadora de Sant Climent, pero no para ponerla en marcha, un requisito necesario para asegurar que cumple todos los parámetros necesarios. La nueva desnitrificadora de Sant Climent utiliza el mismo sistema que la de Malbúger, y servirá para hacer llegar agua en buenas condiciones a la otra parte del municipio.