Denuncian las condiciones laborales en la piscina del 'poli' de Maó: calor excesivo y gases

La edil del Partido Popular, Virginia Victori, interpeló sobre la cuestión al equipo de gobierno, haciendo hincapié en lo nocivo de la situación a la que se enfrentaban el personal y los usuarios del centro deportivo. Reprochó que es un problema que viene de «hace mucho tiempo».

Desde el sindicato, el coordinador del sector de Administración local en la Isla, Andrés Fernández, señalaba este jueves que «estas deficiencias ocurren especialmente en invierno, cuando no se abren ventanas», a pesar de que la máquina deshumidificadora «no funciona bien». Algo que provocó irritaciones, el efecto del «cloro hace que los ojos lloren», agravado por el exceso de calor.

CCOO lo venía denunciando desde meses atrás, pero «parece que ya le están poniendo solución». Según le han trasladado varios trabajadores «abren ventanas y están instalando una nueva máquina».

Alcaide recordó en el pleno que «en enero la máquina dio serios problemas y cerramos la piscina una semana». Y «se reparó y se aumentó la periodicidad de mediciones y registros para tener mejor control de los parámetros». Por eso, aseguró que si continuaran las deficiencias no dudarían en clausurar de nuevo la piscina, «no pondríamos en riesgo» a nadie. Este mismo miércoles, la temperatura en el recinto era de 30 grados, con una humedad del 50 por ciento y niveles de CO2 de 423 y «no hay ninguna queja», según el concejal de Deportes.