La reunión de la Junta de Seguridad, celebrada en presencia de la consellera y el delegado del Gobierno, duró casi dos horas | Josep Bagur Gomila

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Ciutadella se apresta a vivir el Sant Joan con el mayor refuerzo de seguridad de la historia. Hasta un 20 por ciento más de policías pasarán a engrosar el operativo coordinado por el Ayuntamiento, que por vez primera superará el marcado por el Plan Director, que ya el año pasado se cubrió prácticamente al 100 por cien.

Las fiestas de este año movilizarán a más de 500 efectivos, incluidos policías, bomberos, sanitarios, voluntarios de Sant Joan y de Protección Civil. De éstos, unos 340 estarán de servicio durante la tarde del 24 de junio, día de Sant Joan, con motivo de los Jocs des Pla, otros 250 se movilizarán en la víspera durante el Caragol des Born y cerca de 140 velarán por la seguridad del Primer Toc, que por vez primera implicará también a agentes de la Policía Nacional.

La llegada de una segunda Unidad de Prevención y Reacción (UPR), que se desplazará aposta desde Madrid, permitirá disponer de policías nacionales prestos a actuar ante cualquier tumulto o incidente. Esta unidad reforzará a los policías locales de guardia en los turnos de mañana y tarde y la UPR llegada desde Mallorca centrará su actuación en el turno de noche para poder actuar sobre todo en zonas como la de bares del puerto.

Es Pla y ‘Primer toc'

El mayor despliegue policial se explica también por la implicación de otros municipios de Mallorca, como Selva o Pollença, que han accedido a desplazar a varios de sus agentes hasta Ciutadella, y cubriendo turnos de entre 10 y 12 horas. Gracias a ellos, los policías locales procedentes de Mallorca pasarán de 25 a 40 y se añadirán a los entre 50 y 60 que llegarán de otros pueblos de Menorca.

Su presencia permitirá también «dar una mejor respuesta en los momentos álgidos» y de mayor concurrencia, y acompañar con más policías la bajada de la corporación municipal hasta Es Pla una vez celebrado el acto de Sa Convidada.

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El Govern trasladará personal técnico para labores de asesoramiento y desplegará las unidades de Emergencias entre tres y cuatro días antes del inicio de las fiestas.

Los aforos máximos establecidos para este año son de 27.540 asistentes en el Caragol des Born y de 25.422 en los Jocs des Pla.

Este Sant Joan será también el más videovigilado. Estos días se han empezado a instalar las diez cámaras dispuestas a lo largo del centro histórico que emitirán y enviarán imágenes al centro de coordinación. Además, al menos cinco agentes estarán también provistos de una cámara para mostrar cuál es la situación a pie de calle.

Campaña de concienciación

En las próximas semanas se pondrá también en marcha la campaña de concienciación, que el Ayuntamiento pagará con los 100.000 euros que le ha aportado el Govern balear y que, tanto en radio como, sobre todo, en televisión y las redes sociales, incidirá en enviar mensajes a los potenciales visitantes para que estén debidamente informados y prevenidos de los peligros que entraña la fiesta.

El Ayuntamiento espera una afluencia similar a la del año pasado. De hecho, el jefe técnico de Ports de Balears en Menorca, Pere Julián, ha anunciado que la programación de trayectos marítimos con los puertos de Alcúdia y Barcelona no sufrirá alteraciones significativas respecto de años anteriores, de tal forma que en los días punta los barcos atracarán una decena de veces en Son Blanc.

Este viernes se celebra otra reunión para ultimar la coordinación de la Policía con los bomberos, la Cruz Roja y el IB-Salut.

El apunte

«Importa más la actitud que cualquier Junta de Seguridad»

El jefe de la Policía Local, Diego Pastrana, cree que «el primer elemento que hará las fiestas más seguras no es una junta de seguridad, sino la actitud que tengamos los ciutadellencs enmedio de la calle».

Pastrana, que dirige todo el operativo, defiende también los filtros de acceso para regular la afluencia en los actos de mayor masificación, como el Caragol des Born o los Jocs des Pla, «pues se trata de eventos vivos. Con pulseras no podría acceder nadie más que aquellos que las tuvieran. En cambio, con los filtros, centenares o miles de personas entran y salen de Es Pla o Es Born y así permiten que más gente pueda disfrutar in situ de la fiesta. Son un beneficio para el ciudadano».

A la conclusión de la junta, el jefe de Policía también se refirió a la gran cantidad de cámaras que, dispuestas a lo largo del casco antiguo o en manos de los agentes, enviarán imágenes de todo cuanto suceda al centro de coordinación (Cecopal). «Es una medida de seguridad activa de los propios ciudadanos», afirmó.

Por su parte, la alcaldesa Juana Mari Pons agradeció «el esfuerzo y la implicación de los distintos cuerpos para garantizar la seguridad durante las fiestas». La mayor llegada de agentes foráneos «nos ayudará a tener más presencia policial en todo el municipio, también en las urbanizaciones».

El delegado del Gobierno en Balears, Alfonso Rodríguez, garantizó la ayuda de los cuerpos de seguridad del Estado para «reforzar la seguridad donde más falta hace». Y se refirió también a la temporada estival, durante la que se incrementará la plantilla de la Policía Nacional en un 30 por ciento.