«Para Europa, ahora mismo Colombia no es un país que esté en conflicto, porque dicen que la guerrilla ya se desmovilizó, aunque esto habría que ponerlo entre comillas, porque sigue siendo lo mismo. Y por ello, a muchos colombianos no les aprueban el asilo», asegura.
También explica que los ciudadanos colombianos que solicitan protección internacional lo hacen aduciendo persecución política o por motivos de raza. En otros casos, se alega la inseguridad causada por la delincuencia común, un problema muy grave en el país, que en algunas ocasiones deriva en situaciones de extorsión que obligan a mucha gente a cambiar de lugar de residencia.
Otro de los motivos para justificar la petición de asilo es el desplazamiento forzado desde su tierra de origen. «Si eres un campesino y tienes una finca con muchas hectáreas, a veces la guerrilla, los paramilitares o alguna persona que tenga influencia y dinero, aparece para quedarse con las tierras y te dan un ultimátum: o te vas o te matan», denuncia.
Tenorio también asegura que la desaparición de la exigencia del visado para viajar a Europa, aunque sea para estancias cortas, ha hecho que aumenten los ciudadanos colombianos que apuestan por venir a España a probar suerte y a ganarse la vida, por lo que su número ha aumentado de manera notable en la Isla en los últimos años.
Muchos de los que se han instalado en Ciutadella son del municipio de Puerto Tejada, en el departamento de Cauca, mientras que los de Maó proceden de diversas ciudades, como Bogotá o Cali.