Bañistas en la playa de Cala en Porter, en Alaior. | Josep Bagur Gomila

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Los hoteles menorquines han cerrado el mes de mayo con una ocupación media del 51,3 por ciento. Son casi dos puntos porcentuales menos que en el mismo mes del año pasado, aunque se estima que el número de plazas a disposición de los turistas ha sido este año ligeramente superior al del pasado. Menorca es la isla balear que ha registrado ocupaciones más bajas, a bastante distancia de Mallorca, con un 68,67 por ciento de las plazas de alojamiento hotelero ocupadas, y Eivissa y Formentera, con un 67,93 por ciento.

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En el primer mes oficial de temporada turística, los hoteleros menorquines han registrado un total de 516.930 pernoctaciones, el 78,2 por ciento protagonizadas por clientes extranjeros, cuya presencia ha descendido un 4,5 por ciento respecto al mes de mayo de 2022. En cambio el número de pernoctaciones de turistas nacionales ha crecido ligeramente, un 1,7 por ciento, aunque este mercado solo ha representado el 21,7 por ciento de la clientela.

Según la Encuesta de Ocupación Hotelera publicada este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE) la estancia media de los turistas alojados en hoteles en este mes de mayo se ha situado en 5,20 días, ligeramente por encima que la registrada en 2022, de 5,07 días. Menorca es la isla donde los clientes alargan más sus estancias