En calas vírgenes como La Vall, Es Talaier, Cala Mitjana o Binigaus pero también en playas urbanas como Cala en Bosc o Santandria. La venta ambulante en las playas de Menorca se ha extendido este último verano, ejercitándose tanto por tierra como por mar, especialmente en la costa de Ciutadella. La dificultad para controlarla supone otro inconveniente para combatirla, por una parte, por la falta de efectivos policiales, y por otra, por la dificultad de hacer cumplir las sanciones que se aplican a los vendedores.
«Los comerciantes sin licencia cada vez van a más. Hasta el momento, solo se movían por las playas vírgenes, ahora empiezan a extenderse por las urbanas», explica Joaquín Salvador, coordinador de playas de Ciutadella. Ante la situación, el problema principal es la falta de efectivos policiales para hacer un seguimiento riguroso en todas las playas. «Aunque se realizan controles a menudo, en Menorca los vendedores han encontrado una mina», concluye.
Sanciones
Marta Marquès, concejala de Medi Ambient, señala que desde el Ayuntamiento de Ciutadella velan por el cumplimiento de la ordenanza municipal de playas en la que la venta ambulante está tipificada como una infracción grave. Se encargan de «tirar adelante expedientes y procurar que se cumplan las sanciones», asegura. En este sentido, los comerciantes sin licencia suelen ser procedentes de otras regiones, por lo que la parte difícil de imponer una sanción es que su notificación llegue a su destino. «Son gente con domicilio en otros países y, a veces, no es fácil hacerles llegar las multas», señala Marquès.
Consciente de esta dificultad añadida, Josep Carreras, alcalde de Ferreries, explica que su primera opción ante un caso de venta ambulante es, además de abrir un expediente, confiscar los productos, ya que puede llegar a ser más efectivo que poner una multa. Aun así, «los vendedores siempre vuelven a aparecer», se lamenta. En el caso de Ferreries, los agentes policiales realizan controles en Cala Galdana y, en menor medida, en Cala Mitjana. Carreras coincide en que el problema es la insuficiencia de medios para hacer un control específico en Cala Mitjana, debido a su acceso más lejano. «Es una actividad ilícita, pero dada la dimensión de nuestros servicios, hacemos lo que podemos», afirma.
En Es Migjorn se produce la misma situación. Por su parte, el alcalde del municipio, Pere Moll, asegura que intentan controlar en días alternos las playas de la localidad, como Binigaus o Trebalúger, para evitar esta actividad y confirma que «durante el verano se suelen poner, como mínimo, dos o tres sanciones. Además, los policías ejecutan esta labor de control de incógnito, sin utilizar uniforme. «Tenemos permiso para que ciertos policías acudan a vigilar las playas de paisano, vestidos normal», explica Moll.
Por otro lado, Manuel Alonso, presidente de CONCE Menorca mantiene una posición crítica al respecto. «Para terminar con esta práctica ilegal es necesario que las administraciones quieran hacerlo, ya que la fórmula existe». Es un problema que requiere una solución inminente ya que se trata de «un negocio en negro que afea la imagen de Menorca.»
15 comentarios
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Supongamos que cada uno de estos "vendedores ambulantes" venda cada día 50 bebidas a 2€ cada una, o sea 100€ al día por 26 días de trabajo al mes, eso son 2600€ en ingresos al mes. Si cada bebida tiene un coste por ejemplo de 0,30€ por 50 bebidas, eso son 15€ en costes al día, por 26 días son 390€ al mees. Bien, 2600€ en ingresos menos 390€ en costes son 2210€ libres de impuestos. Joder, yo no los gano y seguro que no necesitan trabajar 8 horas al día para vender 50 bebidas.
Os quedariais sorprendidos si supiérais el sueldo que se llevan.. y libres de impuestos
Colin : Viaja un poquito y verás lo que afea realmente al turismo.
Que no delinquen? Algunos de ellos no tienen ni pizca de vergüenza, que además del pastizal que se sacan con su negocio vienen a los comercios a robarnos lo que luego revenden, una vergüenza. Prefiero no ser muy concreta pero al de los mojitos en la playa......jeta grande la suya!
Tendría que existir una LEY efectiva del derecho al descanso, ya está bien tantos inmigrantes por las playas molestando.
Lo peor son los restos de vasos, de piña, coco, sandía, las latas vacías que se quedan tirados. Los que se bajan en barco, ejemplo en Son Saura al subir, la basura la dejan en la arena. Es el guarroturismo que llega. Y desde luego los ambulantes hacen su agosto, durante meses, a 2,50 la bebida como mínimo pues hagan números. Y sin pagar un sólo impuesto. Cualquiera se hace "empresario".
«un negocio en negro que afea la imagen de Menorca.» - Sr. Alonso, el estado de la carretera General, el tema del bus Favarix/Macarella, la Ecotasa, esto si hace mucho dano al imagen de la isla, entre otras Cosas. Si alguien se gana la vida , vender agua y fruta donde les hacen falta, creo es el menor de los problemas que tenemos aqui. Pero a cado politico su momento de Gloria, Sr. Alonso.
Todo lo que no sea recaudar impuestos en España no es legal. Pues que lo hagan legal que no perjudican a nadie que para lo que les interesa ya cambian las leyes.
A primeros de Junio conocí al Señor que lleva el negocio clandestino en la playa de Son Saura de Ciutadella, y como era su primer día con poca venta charlamos sobre el tema, escuchándole puedo asegurar que es muy duro y miserable semejante trabajo, da para muy poco, y su voluntad era la de abonar las tasas que le daría derecho a la actividad pero no se les considera. Posteriormente le veo trajinar con autentica alegría y educación exquisita para con el personal, formando ya una imagen en el paisaje habitual, creo que la autoridad competente debería de tener en cuanta el asunto y tratarlo como se merece, con corrección y en plan positivo.
Que deixin posar un xiringuito a nes pàrking de La Vall amb preus raonables i voreu com a aquesta gent se li acaba es vendre. A més es podrien crear uns quants llocs de feina i l´ajuntament recaudaria algo...