Los asistentes a la manifestación la tarde de este viernes mostraron su disconformidad con la decisión judicial

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Las protestas que este viernes se sucedieron en varias ciudades españolas, en Pamplona y Alcalá de Henares en primer lugar, por hallarse presos en sus cárceles, tuvieron eco también en Maó. Un centenar de personas secundó la acción convocada contra la decisión de la Audiencia de Navarra de poner en libertad a los cinco miembros de La Manada, condenados a nueve años de cárcel por abuso sexual continuado.

Esta resolución, como todas las anteriores del caso, ha recibido el rechazo de organizaciones feministas, sociales y políticas. Una de ellas, Esquerra de Menorca, manifiesta en un comunicado su «estupor y rechazo absoluto a la decisión judicial». Añade que en España «tenemos un serio problema con una Justicia claramente patriarcal», conservadora y más aplicada en reprimir que en reparar el daño causado a los más débiles. Con esta resolución «la Justicia vuelve a escorarse a las posiciones más reaccionarias» y, de ese modo, agrega, desatiende la demanda social de justicia ante la violencia patriarcal y las agresiones contra la mujer.

En su opinión, la liberación de los condenados, pendientes de sentencia firme, lanza un mensaje de impunidad «en contra del criterio de reparación a la víctima».