Maria Camps valora la relación humana con el concejal saliente Emilio Agis, más allá de la rivalidad política. | Gemma Andreu

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La alcaldesa de Alaior, Misericordia Sugrañes, descarta cubrir la plaza de personal eventual de asistente de alcaldía que ocupa Llorenç Cardona, un cargo de confianza que quedará vacante después de la remodelación que deberá realizar el Ayuntamiento tras la renuncia de Emilio Agis como concejal en Alaior. Su salida conlleva la entrada en el equipo de gobierno del mismo Cardona que ocupaba la posición octava en las listas electorales.

Sugrañes asegura que, dado el corto período que queda hasta las próximas elecciones, el Ayuntamiento dejará desierta esta plaza y agrega que pese a que supondrá «un esfuerzo mayor por parte de todos los concejales» el funcionamiento «está muy planificado y organizado». Agrega que aún no se ha sentado a estudiar la reorganización de las áreas municipales tras la salida del concejal de Hacienda, aspecto que confía tener cerrado en las próximas semanas.

Por su parte, a Junts per Lô le llama la atención que «después del show y el follón que ha montado el PP para justificar y poner a sueldo al número ocho de la lista electoral, ahora se le tenga que destituir porque entra a formar parte del equipo de gobierno». Con ello, a su portavoz Maria Camps se le plantea la duda sobre qué hará el PP con este cargo de confianza. Dejar sin cubrir esta plaza (tal como ya ha anunciado la alcaldesa) «evidencia que no servía para nada» porque «una vez el número ocho asciende a concejal, el cargo de confianza deja de ser necesario».

Considera que «cantará ópera el hecho que le habían prometido un sueldo, creyendo que obtendrían ocho concejales como en la anterior legislatura, y se quedaron a siete y justos». Camps recuerda que siempre han denunciado la creación de este cargo, añadido a las siete dedicaciones parciales, con un coste de unos 300.000 euros, y que «su suma supera en una dedicación y media lo que permite la ley». «Un escándalo y una alegalidad», indica.

No obstante, con respecto a la salida de Emilio Agis en el Ayuntamiento, la portavoz de Junts per Lô lamenta que no haya acabado la legislatura y le desea suerte en esta nueva etapa. Pone por delante la relación humana frente a las «diferencias evidentes» porque «somos compañeros, más que rivales políticos». Espera que la distribución que haga el gobierno solvente los dos vacíos que deja Agis, porque «llevaba Hacienda y una parte sustancial de Urbanismo, áreas densas en volumen de trabajo».