Primer proyecto financiado con la regularización hotelera

El alcalde de Ferreries, Josep Carreras, celebra este paso y espera que el proyecto, que permitirá reabrir un tramo de 160 metros, esté ejecutado antes del verano. Si no se tendría que esperar al fin de la temporada turística, ya que una de las condiciones que pone el Consell es que las obras no afecten al desarrollo de la actividad turística en las urbanizaciones.

De hecho la filosofía de esta mejora, al igual que en las demás financiadas con estos fondos, es que repercuta en las mismas zonas donde se encuentran las plazas hoteleras regularizadas, como recordó Mora. En el caso de Ferreries la mayor parte de los 308.000 euros recaudados con la regularización de 88 plazas del hotel Sol Melià se usarán para las obras de consolidación del acantilado, cuyo coste está calculado en 289.596,03 euros. El dinero sobrante se dedicará en el futuro a cambiar parte del alumbrado de Cala Galdana, donde se encuentra el hotel.

Mora declaró que con estas actuaciones «hacemos del defecto una oportunidad», reinvirtiendo lo recaudado de la regularización de plazas en la mejora de los municipios. En Menorca se legalizaron 641 plazas hoteleras entre 2015 y 2017, con las que el Consell ingresó unos 2.243.000 euros que ahora reparte entre los municipios en proporción al número de plazas regularizadas.

El plazo de ejecución de las obras en Cala Galdana, que incluyen la instalación de bulos, mallas y anclajes en el acantilado para sujetar la roca, es «relativamente corto», de cinco semanas, por lo que Carreras ve factible que estén listas para el inicio de temporada si se agilizan los trámites para adjudicarlas y se ejecutan en mayo.