El decreto de guarderías impedirá la apertura de centros sin control

El objetivo del Govern es fijar unas condiciones mínimas que hagan más difícil la apertura de centros de carácter asistencial para niños de 0 a 3 años, las llamadas guarderías low cost. Aunque en Menorca no existe ningún centro de estas características, la jurisprudencia del Tribunal Supremo permite su apertura e impedirlo sería ilegal. Si el Govern no regula esta actividad, los centros de este tipo pueden abrir sin control, incluso en un garaje o un piso pequeño como ha sucedido en las otras islas.

Fina Santiago recuerda que, en la actualidad, en Balears se puede abrir una guardería «con las mismas autorizaciones que necesita una peluquería o una mercería». Ni se exige una titulación o formación mínima para dirigirla, ni se obliga a separar a los niños en función de su edad, ni se establece la necesidad de separar espacios como el comedor, el patio o los cambiadores.

La consellera defiende que el nuevo decreto, que todavía se halla en fase de borrador, establece condiciones como que el director de la guardería tenga titulación universitaria, un programa de intervención diseñado por un maestro especializado en educación infantil, monitores titulados y requisitos higiénicos para el espacio, entre otras.

También niega, como se ha dicho, que el decreto prevea confinar a los niños en un espacio de 1,5 metros cuadrados. Este baremo, matiza, solo se refiere a una de las salas del centro, por lo que se deben sumar los 4 metros cuadrados por niño reservados en el patio o los del comedor.

Para Santiago es «preocupante que como sociedad tengamos regulado cómo dejar un gato y no hayamos pensado cuáles deben ser las condiciones mínimas que debe cumplir una guardería».