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El PP de Menorca ha instado este sábado a MÉS per Menorca a pedir la dimisión del vicepresidente del Govern, Biel Barceló, al ser «responsable de la trama» de contratación de las conselleries de MÉS con la empresa del jefe de campaña de este partido en las pasadas elecciones autonómicas, Jaume Garau.

La secretaria general del PP menorquín, Asunción Pons, afirma que tanto la consellera de Transparencia, Ruth Mateu, recién dimitida, como los consellers Biel Barceló y Vicenç Vidal han incumplido el Código Ético aprobado por el Govern en favor de la transparencia, imparcialidad y objetividad.

El punto quinto del código, ha subrayado Pons, afirma que «las personas titulares de cargos públicos han de evitar cualquier práctica o actuación de favoritismo a determinadas personas o entidades públicas o privadas».

En razón de este artículo, considera Pons, Més per Menorca debería exigir a Ruth responsabilidades por su «mala» gestión al haber «infringido» el Código Ético.

"En lugar de apoyar Més per Menorca a la consellera Ruth Mateu, debe exigirle responsabilidades", ha declarado Asunción Pons, quien afirma que "el tercer Pacte, con sus continuos errores y divisiones internas, será el peor Govern de la Comunidad Autónoma, tanto por su ineficacia como por sus enfrentamientos".

Pons ha señalado también que Més per Menorca sale del Govern sin «haber hecho los deberes», en un clima de enfrentamiento con sus socios, el PSIB-PSOE y MÉS per Mallorca. Ha afirmado que "Més per Menorca sale del Govern sin haber sabido reivindicar ni resolver desde el Consell insular el traspaso de la promoción turística, la recuperación del antiguo hospital Verge del Toro, sin haber conseguido las nuevas plazas sociosanitarias comprometidas para Menorca, y sin haber construido la residencia para pacientes menorquines desplazados a Palma".

La política popular ha mostrado su extrañeza porque MÉS per Menorca continuará apoyando al Govern balear en el Parlament balear, aunque el ejecutivo, con la expulsión de Ruth y el mantenimiento de Barceló y Vicenç, le ha «maltratado» y ha sido «desleal».

Pons ha mantenido que los contratos concedidos a dos empresas de Jaume Garau carecen de utilidad e interés general, como los relativos a analizar qué tipo de público asiste a los conciertos de la Orquesta Sinfónica de Balears, un barómetro de satisfacción turística u otro sobre el impacto económico de actividades culturales.