Cristina Gómez escucha a Tadeo en el pleno de este lunes | Javier Coll

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El equipo jurídico que maneja la querella del Consell contra la sociedad Cesgarden por un presunto delito de fraude procesal estudia en estos momentos la posibilidad de solicitar una suspensión cautelar de los pagos, o en su defecto que las cantidades mensuales que se abonan en estos momentos a la empresa pasen a consignarse a una cuenta específica, para que no pueda disponer del dinero hasta que se haya resuelto definitivamente el caso. Así lo explicó en el bloque de preguntas del pleno del Consell celebrado el lunes la consellera de Servicios Generales, Cristina Gómez.

Explicó la consellera que por idéntica razón el equipo de gobierno ha desistido de momento de la operación de refinanciación de la deuda contraída con Cesgarden, ya que esta medida, que inició el anterior equipo de gobierno con la intención de reducir los importes a satisfacer, implicaría que todo el dinero pendiente se entregara de golpe a Cesgarden. Posteriormente, y si la sentencia diera la razón al Consell, habría que reclamar estas cantidades, con la dificultad que esto conlleva, señaló Gómez. Y por los mismos motivos, señaló, no se reclama ayuda económica al Govern, relató la consellera en respuesta a la representante de la oposición, Pilar Pons Faner.

De cara a los próximos presupuestos de 2017, el Consell contemplará «por prudencia» 3,5 millones de euros correspondientes a los pagos previstos a Cesgarden. Al acabar 2016, se habrán abonado ya a la empresa 6,7 millones de euros, por los que quedaran pendientes 22,1 millones, distribuidos en siete años.