Un vehículo intenta acceder al aparcamiento de pago de Macarella

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Una denuncia ciudadana ha desencadenado los hechos. El Defensor del Pueblo ha solicitado información al Ayuntamiento de Ciutadella sobre la actividad que se está llevando a cabo en el aparcamiento privado de Macarella, el único de cobro de toda la Isla.

El particular advierte de que se realiza una actividad económica sin la licencia pertinente y en una zona protegida medioambientalmente. Por este motivo, el Defensor del Pueblo ha decidido tomar cartas en el asunto e investigar los hechos.

Como primer paso, la Policía Local se personó hace pocos días en la zona para acreditar que allí se desarrolla una actividad económica, en base al cobro de un peaje para poder aparcar en una finca rústica a pie de playa, y que ésta se lleva a cabo sin autorización. La información recopilada ya ha sido registrada en el Ayuntamiento, a la espera de entregarla al Defensor del Pueblo para que tome las acciones que considere oportunas.

El consistorio, por tanto, ya tiene constancia «oficial» de la situación irregular que se realiza en el aparcamiento, hecho que le permite iniciar también el procedimiento administrativo para exigir responsabilidades, si así lo estima conveniente.

Ha sido la denuncia de un particular la que ha permitido actuar a las administraciones. Hasta la fecha, tanto el Govern, como el Consell y el Ayuntamiento, competentes según la materia, defendían la imposibilidad de hacer frente a una situación archiconocida por la falta de un requerimiento.

Aún así, el departamento de Medio Ambiente del Govern envió un inspector a mediados de junio para detectar irregularidades y evaluar los riesgos que conllevaba la existencia de un segundo aparcamiento en un Área Natural de Interés Especial (ANEI) en el que el Plan Especial tan solo contempla el aparcamiento público, con una capacidad de 160 coches, menos de la mitad (350) de los disponibles en el parking privado de pago. El agente envió un informe al consistorio en el que describía los diferentes grados de protección del espacio así como las carencias legales de la actividad que allí se desarrollaba.

Por su parte, el Ayuntamiento siempre ha mantenido que su voluntad es actuar en el aparcamiento para acabar con un práctica que funciona desde hace más de dos décadas, a excepción de paréntesis puntuales. Por eso, solicitó tanto al Consell como al Govern, las otras dos administraciones competentes, informes para recabar información sobre la situación legal del aparcamiento y, al mismo tiempo, cargarse de razones para cuando llegase el momento de tomar medidas.

No obstante, la denuncia particular, aparecida por sorpresa, parece acelerar los pasos para actuar sobre el parking privado de Macarella.