Mae de la Concha posa con su «equipo de trabajo», el maletín del Congreso de los Diputados, institución a la que ahora piensa «dedicar la vida» | Josep Bagur Gomila

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Mae de la Concha (Gijón, 1954) ya sabe qué es ser diputada, aunque su trayectoria en el Congreso ha sido bien corta, menos de cuatro meses. Ahora la secretaria insular de Podemos repite de número 2 por Balears, aunque lo hace en nombre de la coalición Units Podem Mes.

Las encuestas dan por hecho el sorpasso. ¿Cree que sería un fracaso no superar al PSOE?
— Un fracaso sería no llegar a un acuerdo de gobierno con el PSOE, sea cual sea el resultado.

También se habla de que ustedes quieren dar el sorpasso al PP. ¿Realmente tienen opciones?
—En las elecciones generales a menudo ha habido grandes sorpresas. No es imposible ser la primera fuerza.

¿Y en Balears?
— Aquí veo mucho entusiasmo y creo que es posible ser el partido más votado.

Se ha pactado con IU, con Equo, con Més, con Compromís... La sensación es que se quiere pactar con todos para arañar votos.
— Es que se trata de eso. Unas elecciones son para ganar los suficientes apoyos para cambiar las políticas. Queremos ganar y por eso nos presentamos. Sería muy torpe despreciar a otras fuerzas que hace muchos años que luchan por lo mismo que nosotros. La gente nos pedía ir unidos y hemos hecho un esfuerzo para tejer alianzas.

Pero no se ha convencido a Més per Menorca y algunos de sus dirigentes apoyan a Sobirania. ¿Cree que puede restarles votos?
— Més per Menorca ha dado libertad de voto. No restará, en todo caso puede darnos más votos.

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¿Tuvo algo que ver la tensa negociación para el Senado?
— No lo creo. Nuestra intención fue siempre ir juntos. Estoy contenta de tener la posibilidad de contar con una senadora independiente que nos representa a todos.

Ahora se considera al PSOE no como adversario sino como futuro socio, pero desde Podemos le habéis dado muchos palos.
— El PSOE es una cosa muy grande. Tiene una base de militantes, con los que compartimos muchas cosas. Luego tiene unos dirigentes y es allí donde hay más división. No estamos en contra del PSOE, hemos criticado las políticas neoliberales que han impulsado. Si está por la socialdemocracia tendremos puntos en común.

Si el PSOE tiene que elegir entre Podemos y PP, ¿qué cree que hará?
— Tiene que decidir qué políticas va a apoyar. Si apuesta por el socialismo y por los más necesitados o por las grandes empresas. Espero que su militancia empuje hacia un acuerdo para cubrir las necesidades básicas de la ciudadanía.

Ya sabe qué es ser diputada, ¿qué se puede hacer desde el Congreso para mejorar Menorca?
— Hay cuestiones generales que afectan a la Isla, como la reforma laboral, combatir la pobreza energética, un pacto para la educación... En cuanto a Menorca, está el tema del transporte, cuestiones ambientales, la ampliación de la temporada y la mejora de la financiación.

¿Socialdemócrata o comunista?
— Las etiquetas a menudo me sobran. Cuando me compro la ropa lo primero que hago es cortar la etiqueta. No me interesa cómo se define una persona, sino lo que hace. Estamos decididos a hacer unas políticas a favor de la gente y cada uno que lo llame como quiera. Podemos es más una herramienta que otra cosa. Pedro Sánchez dice que es socialdemócrata, y a mí si me lo demuestra me vale.

Acusan a Podemos de querer romper la unidad de España.
— La unidad de España se rompe cuando no hay justicia, cuando no hay equidad, cuando se desprecia una lengua y unas costumbres. En Podemos no somos independentistas, creemos que juntos podemos trabajar más y mejor, siempre que haya un proyecto de país que integre a todos.