Las playas vírgenes de difícil acceso de Ciutadella tendrán vigilancia por mar

Esto va a cambiar. A partir de este verano, todas las playas vírgenes de Ciutadella dispondrán de servicio de vigilancia desde el mar con el fin de «optimizar el servicio y poder actuar con la mayor rapidez posible», explica la concejala de Turismo, Noemí Camps.

Las playas vírgenes aumentan exponencialmente la cifra de visitantes. Son, la carta de presentación de Menorca, de ahí que los turistas deseen conocer estas joyas paisajísticas. Estudios del Observatori Socioambiental de Menorca apuntan a afluencias en las playas que pueden llegar a máximos diarios de 1.500 usuarios en Macarella, un millar en Cala Mitjana, 400 en Cala Pregonda o a más de 450 en Macarelleta.

Las playas de La Vall, Son Saura, Cala en Turqueta y Macarella ya disponían de servicio de socorrismo con caseta a pie de playa. El resto de playas vírgenes de la zona, como pueden ser Cala del Pilar, Es Talaier, Es Bot o Macarelleta, carecía de servicio de emergencias.

Ciutadella incluye ahora en el nuevo pliego de condiciones para este servicio un refuerzo de las dotaciones con dos embarcaciones que van a vigilar todo el litoral desde el mar y con la clara voluntad de complementar el servicio de tierra y controlar las playas sin servicio.

Las embarcaciones empezarán a actuar el 15 de junio y estarán operativas hasta el 15 de septiembre. Habrá además cinco puntos de vigilancia en las playas urbanas y otros cuatro en playas vírgenes.

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