23/09/15 0:00
TW
1

El Parlament instará al Govern al cese del director general del IB-Salut, Juli Fuster, y de Pau Thomàs, asesor de la Conselleria de Trabajo, gracias al apoyo que ayer prestó Podemos a parte de la moción presentada por el Grupo Popular contra la política de nombramientos de altos cargos. Podemos intentó además forzar un posicionamiento de la Cámara para que pidiera también el cese del gerente del SITIBSA, Francisco Fernández Terrés, pero sin éxito, ya que el PP rechazó incorporar su enmienda al texto que finalmente se votó.

Podemos apoyó en concreto el punto de la moción en el que la oposición denunciaba el «nepotismo» que suponen los nombramientos de Fuster, pareja sentimental de la consellera de Salud, Patricia Gómez, y Thomàs, hijo del diputado socialista Vicenç Thomàs.

En su intervención ante la Cámara el diputado de Podemos, Carlos Saura, criticó duramente al PP, al que llegó a comparar con «la mafia». «No votaremos con el PP sino con la ciudadanía», afirmó Saura justificando el primer desmarque de Podemos, nada más iniciarse la legislatura, al Govern de Francina Armengol.

Desde los 'populares', Juan Manuel Lafuente criticó «el doble discurso y la falta de coherencia» de los partidos del pacto en sus nombramientos, y tras la intervención de Saura rechazó sus palabras. «No admitimos que nos insulten ni nos comparen con la mafia, es necesario este debate con educación y serenidad, tenemos todo el derecho», señaló, «ustedes no son el Tribunal de la Inquisición moderno», espetó a Podemos.

Finalmente el punto 5 de la moción fue aprobado con 32 votos a favor (PP, Podemos y Ciudadanos), 24 en contra (PSOE y Més), y tres abstenciones (PI). Este mismo punto incluye la enmienda de adición de Podemos en la que se establece la negativa a que el Govern nombre altos cargos que tengan con sus superiores «cualquier relación de parentesco hasta el cuarto grado, ya sea por consanguinidad o afinidad, en línea directa o colateral».

La portavoz del Grupo parlamentario Socialista, Pilar Costa, aseguró que el nombramiento de Fernández Terrés «parece que es moneda de cambio» ya que los de Fuster y Thomàs eran un asunto cerrado que se ha reabierto debido a la negativa a dar marcha atrás en la designación del gerente del SITIBSA. Matizó que «nepotismo es colocar a alguien sin tener en cuenta sus méritos ni capacidad» y criticó la «pinza» de Podem con el PP. «Me entristece que una formación de izquierdas, que aboga por la regeneración, lo acabe haciendo de la mano del partido más corrupto que ha tenido esta comunidad», dijo.