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Un total de 57 menorquines han perdido la vida en los seis primeros meses de 2014 esperando las ayudas a la dependencia. El dato, facilitado por la consellera de Familia y Servicios Sociales del Govern, Sandra Fernández, en respuesta a una pregunta parlamentaria de la diputada del PSOE Conxa Obrador, refleja el drama que viven muchas familias cuyas demandas de ayuda por situaciones de dependencia reconocida se eternizan.

En el conjunto de Balears, de enero a junio del año en curso, el número de personas con resolución de reconocimiento de dependencia que han fallecido esperando que se resuelva su prestación se eleva hasta las 504, la mayoría radicadas en Mallorca (411) y el resto en Eivissa y Formentera, 36.

Desde principios de año, el número de menorquines con derecho a prestación pero que todavía no han recibido ni un euro se ha ido reduciendo mes a mes hasta el mes de septiembre. En ese periodo de nueve meses, según muestran los datos estadísticos de dependencia del Govern, se ha producido un descenso del 25,6 por ciento, pasando de 640 a 476. Sin embargo, los últimos datos mensuales publicados, referentes al mes de octubre, muestran una evolución radicalmente distinta.

A día 31 de octubre, el número de dependientes que esperan la prestación una vez reconocida su situación se ha disparado hasta las 659 personas.

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