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Casi 26 años después de que se iniciase el proyecto de urbanización de la cala de Trebalúger (en Es Migjorn Gran), la Justicia ha dado definitivamente la razón a la administración que anuló, en virtud de la Ley de Espacios Naturales (LEN) de 1991, las licencias concedidas por el Ayuntamiento de Es Mercadal en diciembre de 1988 para que la promotora construyera 19 viviendas cerca de la playa virgen,

La cuestión se ha estado dirimiendo en los juzgados desde hace 23 años, hasta que el Tribunal Supremo ha dado carpetazo al asunto, ratificando la sentencia dictada por el Tribunal Superior de Balears que rechazaba la reclamación de 27,3 millones de euros (más intereses) que pedía la promotora Trebeluger S.A al Govern balear por los perjuicios ocasionados y con la que pretendía que se le compensara por el valor del suelo urbanizable, así como por el lucro cesante.

Pese a ello, la justicia solo reconoce el derecho de la mercantil a percibir 69.175 euros, por los gastos originados por la concesión de licencias.