Alejandre acudió a la comisión mixta de seguimiento del convenio.

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El ministerio de Fomento comunicó ayer al conseller insular de Movilidad, Luis Alejandre, que no pagará este año la anualidad correspondiente al convenio de carreteras firmado en 2007, 3,56 millones de euros. De ese modo aplica la modificación legal aprobada en diciembre de 2012 por la que se estipula que «no se podrá desembolsar el importe de las actuaciones comprometidas en virtud del convenio con carácter previo a la ejecución y justificación de las obras».

Alejandre explicó asimismo que desde el Ministerio defienden esa decisión atendiendo además a que, desde la firma del convenio, se han adelantado a día de hoy un total de 13,8 millones de euros al Consell Insular para las obras de mejora en la carretera general y que todavía no se ha ejecutado ninguna mejora. Fomento ha decidido así cerrar el grifo «hasta que no empiecen las obras», aclaró el conseller, quien recordó que el cobro que fiaban recibir este año corresponde a obras que se tenían que haber realizado en el año 2010.

El conseller entendió, no obstante, que la decisión de Fomento no supone un gran contratiempo ya que el tramo Maó-Alaior, el primero que se acometerá en la carretera Me-1, está presupuestado en cerca de diez millones de euros, cuando, reiteró, se han recibido para la carretera 13,8 millones.

Por otra parte, Alejandre informó ayer de que en la reunión de la comisión mixta de seguimiento del convenio se aportó la justificación de un gasto de 4,8 millones correspondientes a la finalización de las obras y a las expropiaciones de la variante de Ferreries y de la Me-1.