El daño está hecho y parece que es irreparable. La tasa a los rent a cars que tenía que servir para aumentar los ingresos fiscales de la Comunidad, no sólo no ha conseguido éste objetivo (ya que al final se ha anunciado que se retiraba), sino que lo único que ha logrado es bajar la recaudación de los municipios.
En su día, cuando el Govern anunció la aplicación de esta tasa, de entre 3,5 y 9 euros diarios por coche, en función del vehículo, las empresas de vehículos de alquiler de Menorca como medida de presión domiciliaron toda su flota fuera de la Isla, dejando de pagar a los ayuntamientos los respectivos impuestos de circulación. Ahora, una vez se ha retirado definitivamente la tasa, la mayoría de empresas no volverán a domiciliar sus vehículos en Menorca. Y lo perdido, perdido está.
La presidenta de la Asociación de Vehículos de Alquiler sin Conductores de Menorca, Joana Capó valora de forma positiva la retirada de la tasa, pero admite que lo más probable es que pocas empresas vuelvan a domiciliar su flota en Menorca.
El principal motivo para ello es el económico. Las empresas, con el cambio, han visto reducir los costes, ya que han inscrito sus coches en municipios con un tipo impositivo muy bajo, y ahora ninguna quiere volver a pagar más. Y es que la diferencia es abismal. Por ejemplo, un Opel Zafira en Maó paga 124 euros anuales y en cambio en un pueblo de Madrid, apenas 18, explica Capó.
Las empresas les «sabe mal» no pagar los impuestos en Menorca, pero lamentan que los ayuntamientos de la Isla nunca les hayan «dado facilidades», a la vez que recuerdan que han estado afectados por diversas subidas de impuestos (de carburantes, IVA, compraventa de coches,...), y se encuentran «en una situación límite» agravada por la crisis y, con todo, además «tienen que competir con empresas multinacionales que también tiene su flota domiciliada fuera de la Isla», por lo que «para poder sobrevivir» no les queda otra que inscribir sus vehículos en municipios con el impuesto de circulación más bajo.
Los rent a cars también denuncian que solo con el anuncio de que iban a aplicar este mismo verano la tasa ya han salido perjudicados, ya que ha creado mucha incertidumbre a la hora de fijar los precios.
Los que realmente han salido perjudicados han sido los ayuntamientos, que han perdido ingresos con la fuga de los vehículos de alquiler. Es Mercadal, por ejemplo, ha dejado de ingresar unos 70.000 euros anuales. De allí que el alcalde, Francesc Ametller confía que ahora, que se ha quitado la tasa, vuelvan a domiciliar los coches en Menorca, ya que para el primer edil es «lo más justo», ya que «transitan por las calles y carreteras de la Isla», cuyo mantenimiento tiene un coste.
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