La tensa vuelta de los docentes a las aulas coincidió ayer con la celebración de una sesión extraordinaria de la Mesa Sectorial de Educación con los sindicatos para hablar sobre el inicio de curso. Al término de la misma, el Govern hizo público que instará al instructor a actuar "con la máxima celeridad" en la resolución de los expedientes a los tres directores de institutos de Menorca, así como en la resolución de las alegaciones de las medidas cautelares dictadas contra éstos.
Esa fue una de las propuestas que recoge el documento presentado por la Conselleria de Educación, Cultura y Universidades a los sindicatos, que incluye además otras iniciativas como abrir un proceso de negociación con las organizaciones sindicales para abordar temas como las condiciones laborales del profesorado, la oferta pública de plazas o la creación de una mesa de expertos para valorar el desarrollo del Decreto de Tratamiento Integrado de Lenguas (TIL). Asimismo, la propuesta presentada por el Ejecutivo balear recoge que se tratará también la catalogación de plazas, el pacto de estabilidad de los interinos o los criterios de la lista de interinaje.
Sin embargo, la muestra de voluntad por parte del Govern no satisface a los sindicatos por igual. "Es una propuesta insuficiente, pero es un paso para restablecer el diálogo y la situación del conflicto", manifestó tras la reunión el secretario general del STEI-i, Biel Caldentey, quien avanzó que la posibilidad de una huelga para el 13 de septiembre sigue abierta. En este sentido, declaró que las propuestas de la Conselleria son "una hoja de ruta" que no incluye "compromisos concretos", sino que demuestran que existe una "voluntad de diálogo", y añade que no se volverán a sentar a la Mesa "si no hay propuestas más concretas".
Por otra parte Caldentey, subrayó la "gran desconfianza" que sienten debido a la "campaña de desprestigio" que consideran que ha habido contra los docentes y la "cierta criminalización" que ha padecido el colectivo.
Por su parte, el presidente de ANPE en Balears, Toni Martorell, mostró su satisfacción por el hecho de que la Conselleria "por primera vez en mucho tiempo" haya demostrado "un poco de voluntad negociadora".
No hay marcha atrás
La consellera de Educación, Joana Maria Camps, se mostró satisfecha por el transcurso de la reunión, pero incidió en que en que la aplicación del Decreto TIL no tiene "marcha atrás" y que ésta no supondrá una reducción en las condiciones laborales de los docentes. "La Conselleria está abierta a hablar de condiciones laborales, de todo lo que sea bueno para ellos", manifestó Camps.
En cuanto a la posible desconvocatoria de la huelga, la consellera señaló que es un tema que corresponde decidir a los sindicatos, si bien ha añadido que "por el bien de los alumnos" espera que se desconvoque "para que empiecen con normalidad" el curso escolar. Además, manifestó que el Govern no ha experimentado un "cambio de posturas" en esta materia, sino que había "un montón de desacuerdos y de malas informaciones" sobre este asunto. "Faltaba hablarlo con más calma", concluyó.
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