"Tur ha sido el único alcalde al que los ciudadanos han echado sin haberlo elegido previamente". De este modo tan descarnado comienza la nota de prensa con la que el Grupo Popular del Ayuntamiento de Maó responde al negativo balance de los dos años de mandato que el viernes realizó el PSOE. Antes de desgranar una por una las respuestas a las críticas socialistas, avisan los populares de que "el trauma no superado por el rechazo ciudadano sufrido hace dos años, la frustración, no generan el mejor estado de ánimo para la reflexión seria y razonada".
Habla el PP de Tur y el PSOE, a los que atribuye "una etapa de abulia y demagogia que condenó al municipio a la pérdida de actividad, liderazgo e imagen", y que ha dado paso a "una ciudad más activa, más limpia, más orgullosa de sí misma". Y arrea a Damià Borràs, "mejor contador de historias de ficción que gestor político".
El PP entiende que la oposición desprecia al ciudadano, "al que sigue menospreciando con una análisis tan mezquino y tan distante de la propia percepción ciudadana". Sobre las 40 propuestas presentadas por el PSOE, los populares ven en ellas "un claro ejemplo de cobardía" ya que "presentan ahora como oposición lo que pudieron hacer y no hicieron en el gobierno".
Sobre la denuncia de recortes en servicios sociales, el PP afirma que los socialistas "continúan obsesionados" con este ámbito para "tapar las vergüenzas y la inacción del resto de áreas. No se ha destruido nada en servicios sociales". Expone el PP que el presupuesto en este área ha aumentado en tiempos de reducción general y saca pecho con la Casa de Acogida, que, dicen, Tur nunca visitó.
En cuanto al tráfico, los populares consideran "un claro paradigma entre el discurso y la acción" que el PSOE eligiera Ses Moreres para ubicar ayer una mesa informativa, "es una manera de reconocer el acierto de su peatonalización" y "una manera de reconocer su propia cobardía" ya que anunciaron a mediados de la década pasada esta misma medida que sí ha ejecutado el PP. De iniciativas como Nits de Música al Carrer, apunta el PP que bajo su mandato es cuando han salido adelante, "el ligero matiz que diferencia la cobardía de antes frente a la valentía actual". Atribuyen en parte a la política actual de movilidad la reactivación del centro, "ustedes intentaban pacificar el centro con la paz de los cementerios", espeta el PP al PSOE. "El PP lo ha hecho sin temor a perder votos".
Del topónimo expone el PP que el nombre actual responde a la voluntad de la ciudadanía. Los populares se atribuyen una gestión más valiente, austera, inteligente e imaginativa, frente al despilfarro de la época socialista con gastos como el concierto de Miguel Bosé (24.000 euros) o los 4.000 euros que costó traer a Boris Izaguirre para pronunciar el pregón de las fiestas, "una astracanada".
Otro ejemplo, para el PP, de la diferente manera de actuar es el famoso ascensor del puerto, "que retrata con detalle su abulia frente a nuestra decisión (...). El PP ha evitado nuevas expectativas y se ha dedicado a trabajar, en dos años es una realidad".
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