La Plataforma de Afectados por la Hipoteca y sus escraches se han hecho populares por defender a los indefensos frente a los abusos de la banca y un sistema legal que ampara sus decisiones. Pero no es el único colectivo comprometido con este fin. Desde el año 2000 existe la plataforma Asociación para la Racionalización del Comercio y de la Industria, que atiende a nivel estatal a aquellos inversores afectados por situaciones que entienden injustas contra las que difícilmente pueden combatir de forma individual.
Su alma mater es el abogado y sociólogo Alfredo Luis Jiménez, a través de la empresa Magabogados, que estos días se encuentra en la Isla con motivo de un juicio relativo a uno de estos casos. Y es que la plataforma profesional lleva algunos casos Menorca, dos de ellos relativos a importantes promociones inmobiliarias. El primero es conocido, y afecta a una promoción de 32 viviendas de lujo en la urbanización de Castellosa, en Arenal d'en Castell. Hotelera de Menorca reclama a la CAM una indemnización de 16,7 millones de euros por incumplir el contrato de préstamo, lo que evitó terminar la obra, e incurrir en varias irregularidades. La vista estaba prevista para el 5 de febrero, pero se aplazó por la ausencia de un testigo, el director de la oficina bancaria que concedió el crédito. El martes se retoma en los Juzgados de Ciutadella.
El segundo caso es diferente y de momento no ha pasado a la fase litigiosa. Se trata de un conjunto de 66 villas en Son Parc, junto al campo de golf, que desde hace cuatro años intenta resolver su situación con los bancos. El caso va dando vueltas entre notarios y dependencias judiciales. "Llevo cuatro años intentando que lo admitan a trámite", explica Jiménez. En este caso, la promoción está en manos del "banco malo", puesto que su financiación fue concedida por Bancaja, integrada en Bankia y finalmente derivada a la Sareb, siempre según el relato del propio abogado.
Los casos de las promociones cuya financiación cae en manos de la Sareb o "banco malo" se han convertido en un nuevo reto para Jiménez y su plataforma. El problema, la trampa dice, es que el promotor no puede vender las viviendas, "ni estando al corriente de pago porque no permite subrogar las hipotecas, han perdido el control del préstamo y no permiten la venta". La solución para el promotor pasa por liquidar el préstamo, lo que solo ocurre si otra entidad financiera le da un crédito o vende el conjunto del bloque cobrando en "cash". Algo improbable. "La razón es que la Sareb no quiere líos, y como solo se venden paquetes enteros quiere mantener la integridad de las propiedades. No quiere convivir con otros vecinos ni que haya trabas en una posible conversión".
Los abusos de los bancos es una de las cruzadas de la asociación, y ahora muy especialmente en el tema de promociones enganchadas en su financiación o en el traspaso de su crédito al "banco malo". Sobre estas cuestiones en estos momentos, dice Jiménez, "estamos definiendo las acciones a emprender, ver si son o no criminalizables, o si se puede ir por competencia desleal". Y es que el abogado defiende que lo que están haciendo los bancos con sus propiedades, al venderlas como cualquier inmobiliaria, "es ilegal".
Alfredo Jiménez no deja títere con cabeza, y acusa a jueces y notarios de no asumir su responsabilidad en estas cuestiones, sobre todo estos últimos, "que firman los papeles que les ponen delante los bancos sin comprobar si los cálculos son justos y correctos". Jiménez concluye que "nadie cumple la ley, ni los jueces que se inhiben de forma poco justificada".
La filosofía de la plataforma es defender los intereses de pequeños comercios o promotores que de forma individual, o con los abogados de las patronales, no pueden hacer frente a cuestiones de abusos o injusticias frente a grandes multinacionales, bancos o la propia administración pública. Los promotores inmobiliarios siempre han ocupado un papel destacado, pero ahora, recientemente, ha habido un incremento de este tipo de casos. De hecho, el pasado día 9 el asesoramiento de Alfredo Jiménez y Magabogados fue requerido por la Asociación Provincial de Promotores Inmobiliarios y Agentes Urbanizadores de Valencia y la Federación de Empresarios Valencianos de la Construcción.
La plataforma cuenta con la ventaja de contar con una red de abogados que colaboran de forma desinteresada en el asesoramiento de empresas en apuros. Además, Alfredo Jiménez se ha especializado en este tipo de casos en los que la banca se comporta de forma abusiva con los promotores, "un abogado quizá no percibe las irregularidades de las entidades financieras". Estas triquiñuelas las maneja Jiménez al dedillo. Trabaja en toda España, con cualquier tipo de empresario, pequeño o mediano, que se enfrente a situaciones de indefensión.
Un ejemplo flagrante: Eurovegas. Un agravio comparativo en el trato, según Jiménez, que puede tener consecuencias negativas para el entorno empresarial. La lucha individual en situaciones como esta es complicada, a través de la asociación comercial e industrial se pueden defender los intereses de los afectados.
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