Los alumnos expulsados harán trabajos para la comunidad

La alcaldesa de Alaior, Misericordia Sugrañes, y los directores de ambos centros, Francesc Pons Olives y Ada Goñalons, firmaron este convenio de colaboración que pretende dotar de contenido el tiempo en que el alumno no tenga que acudir al centro. Así, cuando un alumno sea expulsado. a través de los cometidos que realice, podrá reflexionar sobre las consecuencias del comportamiento no adecuado en el centro educativo y, asimismo, abrir la posibilidad de que el menor encuentre alguna motivación en el trabajo que realice de cara a su futuro laboral y profesional.

Autorización
La puesta en marcha de esta iniciativa establece, sin embargo, que el trabajo en beneficio de la comunidad se llevará a cabo siempre posteriormente a una entrevista con los padres o tutores legales del menor. Así, estos deberán dar autorización para que su tutelado participe de estas labores comunitarias.