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El alcalde de Maó, Vicent Tur, se mostró ayer abiertamente favorable a que el Club Marítimo de Maó siga gestionando el surtidor de combustible situado en Sa Punta de Rellotge del puerto.

«El puerto de Maó necesita este servicio, que no se puede demorar, y debe estar operativo durante este verano», manifestó a Ultima Hora Menorca el primer edil de Maó, quien también afirmó que «la gestión debe continuar en manos del club».

Según Tur, «la gasolinera vendrá a compensar el daño social que sufrió el Club Marítimo con la pérdida de la explotación de los amarres del Moll de Llevant, y es una forma de dar respuesta a la necesidad de recursos que precisa esta institución mahonesa sin ánimo ni fin de lucro». El alcalde indicó que no se opone a la convocatoria de un concurso, pero añadió que «debe valorarse el papel que desempeñan las entidades sociales y deportivas».

El presidente del Consell, Marc Pons, instó al presidente de Autoritat Portuària de Balears, Francesc Triay, a «no demorar la decisión para resolver, en el plazo más breve posible, dentro de la legalidad, la ampliación de la superficie de la gasolinera y el plazo de explotación». Tanto Tur como Pons expresaron su sorpresa porque este expediente fue retirado del orden del día en la reunión que el martes celebró el consejo de administración de Autoritat Portuària.

Esta decisión ha causado malestar en la dirección del Club Marítimo, que no entiende cómo se ha paraliza, en el último momento, un expediente ya tramitado.

El presidente de los empresarios marítimos en Menorca, José Ignacio Seguí, ha acusado a Autoritat Portuària de 'venganza' de Autoritat Portuària contra el Club Marítimo y ha afirmado que «los grandes perdedores somos los usuarios, sufrimos los perjuicios de una auténtica vendetta».