Más de un centenar de trabajadores del Consell de Menorca se concentraron esta mañana frente a la sede de la administración insular de Maó para protestar por las medidas de ajuste para reducir el déficit anunciadas por el presidente del Gobierno.
La concentración, convocada por la Junta de Personal y el Comité de empresa de la institución pública, se inició a las 11.00 horas y tuvo una duración aproximada de unos diez minutos. Los representantes sindicales leyeron un manifiesto en el que se mostraban contrarios a los recortes salariales, a la congelación de las pensiones, a la bajada del sueldo del 5 por ciento de los funcionarios y a los recortes en ayudas a la dependencia.
"No es ético que los errores de otros los paguen siempre los mismos", rezaba el documento. Asimismo, criticaba que las medidas "no ayudan a salir de la crisis sino que la empeoran" y apuntaba que "nos tememos que estos recortes sociales no son el final de nada sino el principio de futuros recortes aún más drásticos".
Al finalizar el acto, el presidente de la Junta de Personal y del Comité de Empresa del Consell, José Cabezas, señaló que alrededor de 460 funcionarios de la administración insular se verán afectados por el "zapatazo" y recalcó que "no queremos entrar en una guerra entre trabajadores públicos y privados".
En relación a la posible reestructuración del organigrama del Consell, Cabezas aseguró que la Junta de Personal y el Comité de Empresa han presentado al equipo de gobierno en varias ocasiones un Plan de Austeridad que contemplaba la reducción de la estructura política de la administración insular, entre otras medidas.
"Nosotros no hacemos política pero nunca se han tenido en cuenta nuestras propuestas en este sentido", remachó el representante sindical.
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