La Asociación de Empresas Náuticas de Menorca (ASMEN) quiere evitar que este verano se repitan las multas impuestas por Costas por fondeo ilegal en el puerto de Fornells, y por ello solicita a la administración pública que retire las boyas ubicadas en las aguas de su competencia en Fornells. El presidente de ASMEN, Justo Saura, entiende que no es lógico que si en un determinado espacio no se puede fondear existan instalaciones destinadas precisamente a este actividad prohibida.
La petición a Costas surge por la idiosincrasia del puerto de Fornells, dividido por una línea imaginaria que separa dos aguas: las que pertenecen a Ports de les Illes Balears y las que corrresponden a Costas. Fue en estas últimas aguas donde se impusieron las sanciones de hasta 1.800 euros durante el pasado verano, y que despertaron un elevado malestar entre los sancionados. Para evitar esta situación, ASMEN se reunió la pasada semana con responsables de Costas para hallar soluciones preventivas. Ahora, falta saber si Costas asumirá la petición de la asociación, que también solicitó que se balizara la división entre las dos aguas para que los navegantes puedan saber quién es la autoridad competente en cada zona.
En aras de mejorar el funcionamiento del puerto de Fornells, ASMEN se reunió también con responsables de Ports de les Illes Balears. Uno de los temas que se pusieron sobre la mesa fueron las autorizaciones de los pantalanes provisonales que se instalan en la bahía. A día de hoy aún no se ha autorizado formalmente una de las instalaciones flotantes con cabida para cincuenta embarcaciones, que supone un apoyo básico para las embarcaciones ubicadas en la marina seca del polígono industrial de Es Mercadal. Si bien el acuerdo verbal se ha producido, falta que el permiso escrito se tramite, algo que aún no se ha producido. De momento, los empresarios de la zona usan los pantalanes de Ports, puesto que la ocupación de los mismos aún lo permite. Los problemas surgirán si el permiso no llega pronto, los pantalanes de Ports se llenan y no se ha podido instalar el provisional.
Para evitar que situaciones como ésta se repitan, ASMEN y Ports de les Illes Balears están ultimando un pacto para que las autorizaciones para este tipo de instalaciones temporales tengan una vigencia de tres años, y no de uno como pasa actualmente. En este sentido, Justo Saura asegura que "el nuevo responsable de Ports, Antoni Armengol, se ha mostrado muy receptivo con nuestras propuestas, conocedor de que Fornells no puede solucionar las carencias que tienen Ciutadella o Maó".
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