"L’arbore di Diana". La obra rossiniana que ofrecerá en Madrid ya la representó en el Liceu de Barcelona - Antoni Bofill

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Cuando Simón Orfila inició sus estudios de música y canto en el Conservatorio de Menorca con sólo 16 años no se imaginaba ser el ojo derecho de Alfredo Kraus, cantar en el Gran Teatre del Liceu, debutar en la Scala de Milán ni en el Teatro Real de Madrid como tampoco convertirse en el Douglas d'Angus de "La Donna del Lago" en el carismático Palacio Garnier o, lo que es lo mismo, la Ópera de París.Simón Orfila sigue recogiendo éxitos y será a mediados de junio cuando el joven cantante debute en la Ópera de París con uno de los más bellos florones de la corona rossiniana, "La Donna del Lago".

Se trata de la primera de tantas óperas basadas en Walter Scott y la primera en transpirar un clima precursor del romanticismo inminente. La historia pretende desenredar una típica trama de amores cruzados. Esta ópera y producción le trasladarán, el año que viene, al Covent Garden de Londres, al Teatro Real de Madrid y de nuevo a la Scala de Milán. Cabe recordar que Simón Orfila ya ha representado esta ópera en Pamplona, San Sebastián y San Carlos de Lisboa. Orfila asegura que cantar en París "es uno de mis grandes sueños" que complementa los ya conseguidos retos de debutar en la Scala de Milán, el Teatro Real de Madrid y el Gran Teatre del Liceu.Antes de recalar de nuevo en la Isla para disfrutar de unas merecidas vacaciones de Carnaval "después de cuatro años sin poder vivirlas", resalta, estuvo actuando en Santander encarnando a Colline de la "Bohème" de Giacomo Puccini. Orfila indica que Colline es un estudiante de filosofía bohemio que vive en París con otros tres estudiantes. Toda la libertad y la alegría se transforman en tristeza y drama cuando Mimí se muere por enfermedad. Este personaje se contrapone a Doristo, uno de los papeles centrales de la ópera bufa y cómica "L'Arbore di Diana" que va a empezar a protagonizar el próximo 18 de marzo en el Teatro Real de Madrid. Simón Orfila indica que "el drama en el que desemboca la "Bohème" se contrapone a la comicidad de "L'Arbore di Diana", una pieza muy parecida a la "Flauta mágica" de Mozart y con Doristo, un personaje muy parecido a Papageno". Antes del debut parisino, Orfila viajará hasta Lima donde dejará vibrar al público con el mejor ejemplo del estilo belcantista, es decir, "Norma" de Bellini.

A su vez cabe resaltar que el cantante alaiorense está buscando un hueco en su agenda para poder regalar al público menorquín una actuación en conjunto con la coral mixta del Centro Cultural de Alaior como acto de agradecimiento al nombramiento de Socio de Honor de la entidad. Con ello, Orfila apunta que "me hace muchísima ilusión puesto que fue el primer coro con el que canté cuando tenía 15 años y desde aquel momento no he tenido la oportunidad de volver a actuar con ellos". GalardónSus éxitos se han visto culminados con el recibimiento de su primer premio otorgado por Camerino 22 como mejor personaje de esta temporada de ópera gracias a la encarnación del personaje de Leporello de la obra "Don Giovanni". La entrega del galardón ovetense tendrá lugar el próximo mes de octubre en Oviedo cuando se desplace hasta la ciudad para interpretar "Ana Bolena" de Donizetti.

Después de ser el gran discípulo del tenor y catedrático Alfredo Kraus, actualmente Orfila sigue los consejos del bajo Bonaldo Giaiotti, en Milán. "Nos entendemos muchísimo puesto que ha sido un bajo barítono y ha cantado a mi edad el repertorio que yo estoy ofreciendo". Esta confluencia de similitudes ha sido la base para que profesor y alumno se entiendan con sólo una mirada. Con ello, Orfila recalca que "recibir consejos de un gran maestro es lo mejor que te puede pasar ya que en esta carrera nunca se sabe todo". Nos devela que su máxima ilusión es cantar en el Metropolitan de Nueva York.

Y no duda en asegurar que saborear de vez en cuando la tranquilidad de Menorca junto a su familia y amigos es parte de sus más preciados deseos.